Dicen que una imagen vale más que mil palabras, y si hay que buscar una que refleje cómo fue el transcurso de la primera mitad del FC Barcelona-Valencia de este jueves, sin lugar a dudas es la que pueden ver de Leo Messi rodeado de hasta cinco jugadores contrarios.

Porque, aunque el FC Barcelona intentó atacar por todos los flancos con Leo Messi moviéndose con total libertad por la zona amplia de la cancha y el balcón del área, jamás encontró profundidad durante la primera mitad para disponer de oportunidades claras de gol, a excepción de un pase de la muerte que no llegó a rematar por muy poco Luis Suárez.

Los de Ernesto Valverde dispusieron de un 80% de la posesión, algo que era tradicional en los tiempos de Pep Guardiola y Xavi Hernández. Sin embargo, los valencianistas se encerraron atrás y en la imagen que encabeza esta noticia podemos ver cómo Rodrigo, la referencia y delantero centro del Valencia, se encontraba defendiendo a pocos metros de su propia área a Leo Messi.

Es lo que tiene el mejor jugador del mundo, que es capaz de acumular rivales con tan sólo recibir el balón, dado el pavor que causa a los jugadores contrarios. El FC Barcelona jugó bien a nivel global en la primera mitad, aunque de manera algo conservadora y algo falto de una marcha más de velocidad en las combinaciones para desordenar al equipo rival.

Valverde reaccionó en la segunda mitad

Fruto del estatismo de la primera mitad, Valverde decidió empezar a introducir variantes en el segundo tiempo y, en el minuto 58, Aleix Vidal se marchó del campo para dejar sitio a Philippe Coutinho, quien se llevó una ovación del Camp Nou a pesar de llevar tan sólo unos días en la capital catalana. La técnica y talento del brasileño, una posible solución para desencallar al equipo. Todo un lujo tenerle en el banco.