Cristiano Ronaldo volvió a demostrar que su ombligo es sagrado y que se lo mira cuando quiere. El delantero portugués sigue pensando que no hay nadie que pueda compararse a él y volvió a hacer gala de sus méritos. Parece que le cuesta asumir que hay alguien mejor, algo que se empeña en negar ante los medios o, en este caso, en las redes sociales.
En este sentido, el nuevo delantero de la Juventus de Turín ha escrito un nuevo capítulo de egolatría y ganas de mostrarle al mundo que, a su criterio, es el mejor jugador de fútbol de todos los tiempos. Esta vez lo ha hecho, a simple vista, de forma disimulada a través de su cuenta oficial de Instagram.
La publicación tiene su origen en Pekín, capital de China, donde Cristiano Ronaldo está protagonizando algunos actos publicitarios. En esta ocasión, ha estado en una tienda de Nike en la que se pueden ver todo tipo de zapatillas deportivas y de camisetas. Una de esas prendas ha dado pie a una nueva 'autoarenga' del portugués.
En la imagen en cuestión, se puede ver a Cristiano Ronaldo en primer plano junto a algunas zapatillas deportivas. Al fondo a la izquierda de la imagen, hay varias camisetas plegadas, pero en una de ellas se puede leer claramente 'the GOAT' (siglas que, traducidas del inglés, significan 'el mejor de todos los tiempos'). Tratándose de Cristiano, se hace complicado pensar que se trata de una casualidad no estudiada previamente.
Cristiano Ronaldo, pese a ser consciente de la presencia de Leo Messi, el mejor jugador de todos los tiempos, en el panorama futbolístico actual, sigue pensando que no hay nadie que le pueda igualar. Así lo ha comentado durante toda su carrera, durante la que ha dejado claro que no hay nadie que se pueda comparar a él.
La diferencia entre ambos es que Messi no necesita hablar fuera del campo para evidenciar la realidad. Ronaldo es un gran rematador y un jugador eléctrico durante su juventud, pero nunca se ha equiparado al argentino en influencia en el juego de su equipo. Ambos son dos goleadores infalibles, pero el astro argentino va mucho más allá ya que es fundamental para la construcción del juego de ataque.