No fue el mejor partido de Argentina, ni tampoco de Leo Messi. Y pese a ello, podría tratarse de un encuentro que refuerce anímicamente a la albiceleste y al propio Messi de cara a los siguientes compromisos de la albiceleste, después del calor y apoyo que los jugadores recibieron de parte de los aficionados que llenaron las gradas del Monumental de Buenos Aires.

Leo Messi decantó la balanza contra Chile al ejecutar de manera magistral un penalti en el que engañó por completo a Claudio Bravo, siguiendo con su descomunal estadística esta temporada 2016-17 con las penas máximas, al no haber fallado ni una ni con el Barça ni con Argentina.

Como es natural, "La Pulga" corrió a celebrarlo a lo grande, dedicó el gol al cielo y saludó a los aficionados de las gradas, que le respondieron con una ovación que se escuchó en todo Buenos Aires, con parte del público haciendo también el gesto de idolatrarle con las manos.

Messi se gana a pulso el cariño en Argentina

Escenario perfecto para un Leo Messi a quien le hubiese gustado marcar más goles y desplegar un mejor juego, pero que seguro que no se quejará al tener tercera clasificada ya a la albiceleste en el torneo que da acceso al Mundial de Rusia 2018.

La relación compleja entre Messi y la afición de Argentina, en este sentido, parece que poco a poco va cerrando heridas. Eso sí, todo dependerá de que la albiceleste siga obteniendo buenos resultados y sentencie en las próximas citas la clasificación para el Mundial de Rusia 2018.