Luis Suárez es un delantero insaciable, que nunca deja de buscar la portería contraria y que suele salvar al FC Barcelona en momentos determinantes. Un nuevo ejemplo volvió a verse este martes en el Camp Nou, cuando en el minuto 42 el charrúa recogió el rechace tras un disparo potente y raso de Leo Messi para mermar el ánimo del Atlético y reducir sus opciones en las semifinales de Copa del Rey 2016-17.
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El ariete uruguayo puso por delante al FC Barcelona en el partido y decantó seriamente las posibilidades de acceder a la final, después del 1-2 cosechado en la ida y de unos treinta primeros minutos de la primera mitad, en el partido de vuelta, de auténtica pesadilla para el Barcelona.
Luis Suárez apareció cuando tenía que hacerlo
El Atlético de Madrid asedió la portería de Cillessen, pero las aguas bajaron en los últimos 15 minutos de la primera mitad y eso lo aprovecharon los astros del Barça para volver a alinearse. Leo Messi recibió un balón en la frontal del área y disparó sin pensarlo, seguramente sabiendo que o bien iría dentro o bien estaría ahí Luis Suárez con la caña preparada.
Y, efectivamente, así fue. El "cazador" de goles uruguayo, Luis Suárez, se colocó perfectamente para evitar el fuera de juego y enviar el esférico al fondo de la portería de Miguel Ángel Moyá, con el guardameta ya totalmente vendido.
1-0 provisional para el Barcelona, y el Atlético que en esos momentos ya necesitaba tres goles para pasar directamente a la final, y dos para mandar la eliminatoria a la prórroga. Luis Suárez, como siempre, esencial.