Después de estar durante más de un mes sin disputar ni un solo minuto en los siete encuentros que tuvo el FC Barcelona antes del último encuentro en Riazor, Marc Bartra volvió a tener su oportunidad frente al Sporting de Gijón en la segunda parte del partido para seguir sumando. El central catalán parece que ha recuperado la confianza de un Luis Enrique que se congratuló de su buen encuentro frente al Deportivo de la Coruña, donde incluso anotó un golazo.

Es por ello que el técnico asturiano no dudó en meter al canterano en el segundo tiempo del encuentro frente a los gijoneses. Bartra sustituyó a un Gerard Piqué todavía dolido de su cintura en el minuto 66 de encuentro. Y sus casi treinta minutos sobre el verde del Camp Nou fueron muy correctos, sin ningún fallo y cortando un par de ocasiones de peligro.

Además, parece que cada vez se encuentra mucho mejor compartiendo pareja en la zaga junto a Javier Mascherano. Ambos se complementan a la perfección y frente a los rojiblancos volvió a quedar demostrado. Cuando Bartra subía a achicar algún balón, el de San Lorenzo le guardaba la espalda, cosa que pasaba también al revés en alguna "aventura" de Mascherano hacia el centro del campo.

El buen partido de Bartra en Riazor tampoco pasó desapercibido por parte del Camp Nou que coreó su nombre a la entrada del terreno de juego. Marc es un hombre muy querido por el barcelonismo dado su entrega, sacrificio y que nunca ha dicho ninguna palabra mal sonante quejándose de su situación. Un hombre que todo el mundo querría tener en su equipo.