Después de una temporada muy sacrificada, Sergi Roberto puede respirar tranquilo. Sus actuaciones en el lateral derecho del Barça serán recordadas, pero su sitio vuelve a ser la media porque ya hay defensa de garantía. Ernesto Valverde ha hecho una apuesta y Nélson Semedo está respondiendo a su confianza.

Al carrilero portugués le pudo la presión en los primeros días y cedió ante el ímpetu de Aleix Vidal, pero en las últimas semanas y con más entrenamientos en las piernas, el catalán ha acabado en la grada y el lisboeta se ha ganado la admiración del Camp Nou. No había más alternativas en su puesto para el duelo frente al Espanyol, pero el luso demostró que está preparado para cumplir.

El derbi sirvió para ver otro paso adelante de Semedo, algo más suelto en ataque y, sobre todo, con buena sintonía con sus compañeros. Sus combinaciones fueron habituales durante todo el encuentro, y aunque le faltó algo de atrevimiento ofensivo, cumplió con correción en la defensa, donde se le empieza a ver más comodo y ajustado.

La insistencia de Valverde ha tenido su premio, aunque todavía falta mucho para ver la mejor versión de un lateral muy joven pero con mucho recorrido, tanto en el césped como en su carrera. Aún está por comprobar su valía en un partido de altos vuelos, y la llegada de la Juventus se presenta como una buena oportunidad para mostrar su eficacia bajo presión

Amigo de todos

De momento, lo que está claro es que Semedo ha entrado con buen pie en el vestuario del Barça, en el que su carácter alegre y tranquilo ha calado hondo. El mismo Andrés Iniesta se fotografiaba junto a él tras el partido de LaLiga, y los aficionados destacaban encantados sus grandes actuaciones en los últimos días. Al portugués no le gusta complicarse, y parece haber encontrado un camino hacia el éxito.

Esta publicación resume la actuación de Nélson Semedo en el derbi catalán.