FC Barcelona y RCD Espanyol han trasladado un mensaje de calma y 'fair-play' con la tradicional fotografía de entrenadores previa al 'derbi' de este domingo, en el que se espera desde hace días un ambiente muy caldeado en las gradas de Cornellá-El Prat, especialmente contra Gerard Piqué y Sergio Busquets por la polémica que se desprendió de sus declaraciones tras la eliminación 'perica' en cuartos de Copa del Rey.

Valverde y Quique Sánchez Flores han querido rebajar tensiones con la foto de entrenadores, algo que recordemos hacía tiempo que no se llevaba a cabo debido a que la temporada pasada, con Luis Enrique en el banquillo, los técnicos apostaron por no realizar el acto debido a la mala relación entre el asturiano y el actual preparador del Espanyol.

Con Valverde las cosas han cambiado, y el 'Txingurri' no sólo ha devuelto la tranquilidad absoluta al vestuario sino que dicha relajación se respira también en las ruedas de prensa y en los actos institucionales, sin que el FC Barcelona entre en controversias.

De hecho, en la rueda de prensa de este sábado Valverde ya se encargó de recordar que el de este domingo no deja de ser "un partido de fútbol", por lo que las aficiones de uno y otro bando no podrán enloquecer ni caer en actos deshonrosos, que puedan perjudicar además a sus equipos.

El fútbol, por encima de todo en el Espanyol-Barça

Tras el intercambio de camisetas entre Quique Sánchez Flores y Valverde, quien por cierto dirigió al Espanyol, el único mensaje es que este domingo se respire fútbol por todos los costados, sin la aparición de polémicas extradeportivas que manchen una competición tan bella y disputada como es LaLiga Santander 2017-18, donde las rivalidades se llevan al límite.