El Real Madrid gana con lo justo a un escaso Espanyol (2-0)

El Real Madrid sumó un nuevo triunfo en casa ante el RCD Espanyol, que apenas ofreció resistencia contra un rival lanzado. En la capital se vivió el duelo que se preveía, con los locales esperando que la inercia les guiara hasta los tres puntos y los visitantes tratando de no salir goleados. Raphaël Varane y Karim Benzema resolvieron y Diego López fue protagonista, y ni siquiera la expulsión de Ferland Mendy cambió el panorama.

En el Santiago Bernabéu se enfrentaban uno de los líderes y el penúltimo clasificado, y sus diferencias fueron demasiado evidentes. A los 'merengues' les costó generar en algunos tramos del encuentro fruto de su falta de intensidad, pero las lagunas de los 'pericos', que se asomaron en contadas ocasiones al área de Thibaut Courtois, fueron suficientes para que en un par de acelerones se amarrara otra victoria.

Liderados por un hiperactivo Vinicius y con Rodrygo desaparecido, los blancos se adueñaron de la posesión y empezaron a lanzar avisos. El carioca fue el primero en intentarlo pero no inquietó al cancerbero, y le siguió el de Sao Paulo con un disparo que no cogió portería. Los pupilos de Pablo Machín se defendían sin demasiados problemas, y Diego López paraba también sin agobios tiros tímidos como el de Benzema.

El susto que Esteban Granero le dio a Courtois espoleó a los de Zinedine Zidane, que apretaron para irse con ventaja al descanso. El centrocampista le ganó la espalda a Dani Carvajal y conectó un testarazo a bocajarro, que hizo estirarse al belga antes de que el peligro viajara al campo contrario. El ex del Flamengo se estrelló contra el arquero, pero los de casa olieron sangre y les ayudó un invitado sorpresa.

Un disparo desde la distancia de Fede Valverde forzó un saque de esquina que resultó determinante. En primera instancia no hubo gol, pero la jugada siguió y la remató Varane. Benzema filtró un pase, Casemiro le dejó sitio y el central cruzó el esférico con la zurda. Después Vinicius demostró que la definición no es lo suyo, y se jugó la segunda tarjeta amarilla con un resbalón que le pudo costar muy caro.

El Espanyol no reacciona y Benzema sentencia

Si en la primera mitad el ritmo había sido bajo, la intensidad cayó todavía más tras el paso por vestuarios, y sólo dos chispazos de Benzema animaron a un público que quería más esfuerzo de su equipo. No pasaban apuros los locales pero el marcador era demasiado corto, lo que podía traducirse en algún disgusto de última hora tras las dos oportunidades perdonadas por el ex del Olympique de Lyon.

Las penas del Espanyol se vieron en una acción que significa otro paso del Madrid en LaLiga, en la que se mantiene su pulso con el FC Barcelona. Valverde y Karim se pasearon por el área sin apenas oposición, y la zaga visitante no logró evitar un pase de la muerte que el galo apenas tuvo que empujar. Mendy se marchó a la calle por una segunda amarilla que bien pudo ser roja, pero ni así despertaron los de Machín.