Real Madrid y Al-Ain disputarán la final del Mundial de Clubes 2018, tras imponerse en sus enfrentamientos de semis al Kashima Antlers y al River Plate. Más allá de los encuentros que quedan por disputarse antes de poner punto y final a la competición, la resaca de la eliminación de los argentinos aún dura, y está teniendo especial relevancia en las redes sociales.
Los pupilos de Marcelo Gallardo no lograron ofrecer su mejor nivel contra el conjunto anfitrión, y lo pagaron en una definitiva tanda de penaltis. Aunque dispusieron también también una pena máxima a favor durante el tiempo reglamentario, tampoco anotaron, y tras un 2-2 que no se movió en la prórroga, los once metros decidieron, con una serie de aciertos sin fallo hasta el error clave de Enzo Pérez.
Las lamentaciones de los 'millonarios' llevan ya días sonando, pero hay una muy peculiar que se ha hecho viral. Un hincha de la 'banda' llegó a los Emiratos Árabes para ver la final, y al aterrizar descubrió que su equipo había sido derrotado. Una sorpresa muy desagradable, y más tras haber recorrido medio mundo para presenciar un duelo en el que ya no podrá animar a su favorito.
El aficionado en cuestión explica que estuvo escuchando el alargue en el avión, que en las instalaciones ya estaba pendiente de la tanda, pero cuando llegó su turno de entrar en territorio emiratí, justo sucedió lo peor. Al volver a mirar su teléfono móvil, 5-4 para Al-Ain, que jugará por el título contra el vigente campeón del torneo.
"No sé qué hacer acá. ¿Qué hago acá? No se puede creer", repite entre desconsolado y divertido. Sus amigos y familiares se lo toman con humor mientras se graban las imágenes, a la espera de disfrutar, con algo de amargura, de unos días libres en un país por explorar. Porque el fútbol no les dará ya muchas alegrías.
El Real Madrid quiere alejar sus dudas
Pese a que ya era favorito contra cualquier adversario, al Real Madrid se le ha puesto muy de cara la conquista del título, lo que le podría alejar de sus propias dudas. Los blancos llegaban advertidos y no se dejaron sorprender por el Kashima, y repetirán precaución en unos días para volver a casa con la copa si demuestran su superioridad y dejan en la calle al ilusionado Al-Ain.