Benzema sostiene a un Madrid que volvió a ofrecer muy poco contra el Leganés (1-1)

Todavía le quedan unos meses a la temporada 2018-19, pero cada jornada de LaLiga es un martirio para el Real Madrid. El conjunto 'merengue' sabe que ya no se juega nada y eso se nota en el terreno de juego, donde los rivales le sacan los colores semana sí, semana también. Karim Benzema es de los pocos que sigue aguantando el tipo, y el que salva el poco honor que queda hasta que el mercado de fichajes arregle el desastre.

Los primeros minutos minutos bastaron para entender que el duelo en Butarque iba a quedar marcado por detalles, porque las ocasiones, desde luego, escasearon. La mejor de los visitantes en los 45 minutos iniciales fue un tiro centrado de Marco Asensio que no puso en problemas al guardameta, y antes de que se abriera la lata, un prolongación de Dimitrios Siovas habilitó un cabezazo de Martin Braithwaite que se marchó fuera por poco.

Entre el dominio infructuoso de los hombres de Zinedine Zidane y mucha fricción en cada disputa se fue acercando el descanso, que llegó precedido de una diana del Leganés. La zaga 'merengue' quedó, una vez más, dolorosamente retratada, porque permitió que un saque de banda acabara en el corazón del área donde el danés robó un balón que cedió atrás. Jonathan Silva agradeció el regalo y con un disparo colocado puso el esférico lejos del alcance de Keylor Navas.

El Real Madrid mejora, pero no lo suficiente

La historia que lleva meses repitiéndose no fue muy distinta este lunes, en el que el primer arreón madridista acabó con el empate. Hubo toque de corneta en el paso por vestuarios y en la reanudación resolvió el de siempre, un Karim Benzema que se coló entre las murallas adversarias con un gran pase de Luka Modric, y tras disparar y toparse con Iván Cuéllar, recogió el rechace para marcar a puerta vacía.

Mejoró por momentos el Real Madrid, pero el Leganés igualó las fuerzas y supo salir airoso de las oportunidades peligrosas. Lo intentó de nuevo Asensio en una que no precisó y en otra que topó con el cancerbero, pero poco a poco fue muriendo el enfrentamiento y pese a los últimos coletazos el marcador ya no se movió más.

Pudo decantarlo un Youssef En-Nesyri al que le anularon un gol por un fuera de juego claro, o un Marcelo que probó de nuevo la fiabilidad del portero 'pepinero'. El final del espectáculo lo puso un Gareth Bale que pasó sin pena ni gloria por Butarque, en un cuento con pocas diferencias porque en este equipo, hasta que el mercado lo remedie, no hay mucho a lo que agarrarse. Para el resto siempre está Benzema.