Después de una inesperada derrota en el Santiago Bernabéu, el Real Madrid ha logrado enderezar el rumbo, por lo menos, de momento. El conjunto 'merengue' ha sufrido hasta el último instante para arrancarle tres puntos al Alavés, pero a pesar de la crisis que se ha instalado en el vestuario madridista, Zinedine Zidane continúa con su aire tranquilo.

"Sabemos que es difícil en todos los campos, el Alavés necesitaba puntos y están los últimos, han hecho un buen partido. Estoy satisfecho, podemos estarlo, porque conseguimos lo que queríamos, los tres puntos. Vamos a tener días mucho mejores, en el juego sobre todo, pero hay que darles la enhorabuena, al final cada tres días es un esfuerzo, pueden estar contentos", ha apuntado el francés tras el encuentro.

A pesar de su optimismo, sí se ha acordado de los problemas en las últimas semanas, pero ha señalado que lo importante es seguir hacia adelante: "Sí, podíamos haber no ganado el partido, pero esto es el fútbol. Para nosotros irnos con los dos goles es muy poco. Hay que tener paciencia. No es un momento brillante y hay que aguantar. Seguro que otro días tendremos mejor juego".

Cristiano tampoco es problema

La insistencia de los periodistas ha llevado a Zidane a comentar la situación de Cristiano Ronaldo, que sigue sin marcar y muestra síntomas de su ansiedad sobre el campo. Para su entrenador, sin embargo, no pasa nada: "Cuando no marca preguntáis, pero él está tranquilo. Quiere marcar y tuvo ocasiones para hacerlo. Pero al final, como siempre, hará la diferencia".

Respecto a los ajustes tácticos que prueba con el luso, al que acerca a la posición de delantero centro para aprovechar su pegada y compensar la falta de un '9' suplente, ha afirmado que no son definitivos: "Le gusta su posición y podemos jugar en diferentes dibujos. Ante el Alavés estuvo él sólo por delante pero el martes podemos cambiar".