El Real Madrid-Real Betis del pasado fin de semana dejó, además de otro pinchazo del equipo blanco, una curiosa imagen desde la banda con Joaquín de protagonista. El veteranísimo capitán verdiblanco estaba calentando antes de saltar al campo cuando llegó un contraataque de los madridistas llevado por Vinicius Jr.

El brasileño conducía la pelota y encaraba el área ante la defensa bética y las cámaras captaron a Joaquín diciendo que "es muy malo" y no iba a marcar. Esta curiosa imagen ha dado la vuelta a España y ha salido en todos los lugares. Tras la repercusión que ha tenido, el ex del Valencia o la Fiorentina ha salido ante los medios a explicarse.

El ex internacional español habló con Canal Sur Radio y se disculpó con Vinicius, a quien no quería faltarle al respeto. "Ese comentario no tenía que haber salido nunca, lo hice para mí y el compañero que estaba en la banda, por lo que quiero pedirle disculpas públicamente a Vinicius", afirmó el capitán del Betis.

El verdiblanco fue más allá y, con un chiste, explicó lo que quería decir con su comentario. Joaquín solo se refería a que 'Vini' sigue siendo inofensivo de cara a gol. "Con 19 años es un fenómeno, aunque ante el gol le pasa como a mí, que tengo menos peligro que un gitano sin primo", señaló de manera irónica el del Puerto de Santa María.

Lo cierto es que, aunque en las formas no estuviese acertado, en el fondo el bético sí tiene razón. Vinicius sigue sin tener el acierto que debería cuando se mete al área rival y sigue eligiendo mal la jugada final. Contra el Betis, por ejemplo, creó peligro cada vez que encaraba, pero no llegó a transformarlo en gol. De hecho, incluso perdonó una oportunidad clara ante Joel tras un gran control.

Precipitado augurar el fracaso de Vinicius

En el madridismo ya hay quien duda del ex del Flamengo y las comparaciones con Rodrygo, que lleva cinco goles en seis partidos​ con el Madrid, se suceden. Hay quien piensa que Vinicius nunca aprenderá a definir de cara a gol y por eso nunca triunfará. La realidad es que el extremo solo tiene 19 años y que nadie sabe si dónde está su techo. Para ser una estrella deberá empezar a marcar goles, pero con su velocidad, potencia y desequilibrio, parece precipitado augurar que el delantero fracasará en el conjunto merengue.