Está por ver cuál será el desenlace de la Champions, pero de momento la temporada del Real Madrid no está cumpliendo las expectativas. Después de un gran año, la presente campaña ha colmado la paciencia de Florentino Pérez, que intentará sacudir a su plantilla con una renovación en verano. Algunos fichajes podrían estar más cerca de lo esperado.

Y es que varios jugadores de talla mundial han ofrecido sus servicios al conjunto blanco, más allá de los flirteos que se han producido con estrellas como Neymar o Eden Hazard. El primero en declarar su disposición a cambiar de aires ha sido un compañero y compatriota del belga, el guardameta Thibaut Courtois. En el Santiago Bernabéu sólo tienen ojos para David de Gea, pero está claro que al de Bree tampoco le harían ascos.

En las últimas semanas, el portero del Chelsea ha dejado caer que sus hijos viven en Madrid, y que volver a España era una posibilidad que había tomado mucha fuerza. En plenas negociaciones para renovar su contrato, que expira en 2019, se ha visto obligado a matizar su discurso, aunque no lo ha cambiado demasiado.

"No tengo claro mi futuro. Lo que dije que mi corazón está en Madrid se interpretó mal, aunque tengo dos niños en España, en Madrid, y eso no es fácil. Me queda un año de contrato y estoy feliz y hablando para renovar. El Chelsea ha apostado por mí desde el primero momento y eso no se olvida. No creo que Florentino Pérez me llame, llamará a mi representante y le escuchará".

Revolución ofensiva

Si Kiko Casilla y Keylor Navas están en la rampa de salida, también lo están algunos 'intocables' en el vestuario madridista. En la delantera la dudas apuntan a Karim Benzema y Gareth Bale, y sólo Cristiano Ronaldo se salvaría de la quema. Tanto si salen uno como dos miembros de la 'BBC', la repuesta podría llegar con una incorporación galáctica.

Y quien ha vuelto a ponerse a tiro después de mucho tiempo reconociendo su simpatía por el Madrid es Robert Lewandowski, aunque su contrato con el Bayern sigue vigente hasta 2021. El ariete polaco ha despedido a su representante, y muchos interpretan este movimiento como una preparación para forzar un traspaso el próximo verano.

Aunque está claro que los bávaros no regalaran a una de sus grandes estrellas y a un punta que ofrece un rendimiento destacado además de una sólida cartilla de goles, podrían estar receptivos si la oferta es interesante, ya que el de Varsovia tiene 29 años y cumplirá 30 el próximo mes de agosto.