Jesé Rodríguez fue la eterna promesa en el Real Madrid. El delantero grancanario triunfó en las categorías inferiores y las expectativas sobre su ascenso al primer equipo eran tremendamente grandes. Su debut fue bueno y todavía alimentó más los elogios de la prensa hacia el jugador. Todo apuntaba a que sería un puntal del equipo blanco.

No obstante, una lesión de rodilla lo cambió todo. Jesé no volvió a ser el mismo una vez recuperado y fue vendido al Paris Saint-Germain, donde no consiguió hacerse un hueco pese a la confianza que Unai Emery había depositado en él. Tras cesiones en la UD Las Palmas y al Stoke City, intenta volver a sentirse futbolista entrenándose con el equipo francés, aunque no tiene ficha.

En una reciente entrevista con el diario As, Jesé ha reconocido que se sentía muy solo cuando era jugador del Real Madrid y que, tras su lesión de rodilla, muy pocos compañeros suyos en el conjunto blanco se acordaron de él. "Ahí te das cuenta de muchas cosas. (...) Yo pensé que tenía amigos en el vestuario del Madrid y han dejado de serlo porque tampoco se han preocupado o han contestado a mis mensajes", comentó.

Jesé lamentó el hecho de que haya gente que le haya fallado durante su carrera: "Crees que tienes amistades verdaderas y que dan todo por ti y luego a la hora de la verdad no te corrigen cuando estás haciendo las cosas mal. Al final los únicos que no te van a fallar son tus familiares. Yo me senté con ellos y les dije que quería cambiar cosas. Hice clic".

Jesé admite sus errores

El extremo canario reconoció que es complicado llegar al primer equipo siendo tan joven. "Es difícil, pero estás feliz y alucinas con lo que tienes alrededor. Quieres comerte el mundo. El problema llega cuando te acomodas. Eso fue lo que me pasó: me acomodé. A ese nivel no puedes acomodarte nunca", comentó el ex madridista.

Jesé reconoce haberse equivocado en su forma de vivir en el Real Madrid, ya que no aprovechó esa oportunidad. "Había llegado al Madrid, con 16 años marqué con el primer equipo, me pusieron un contrato delante, lo había hecho todo bien hasta la lesión. Cuando volví, como que me conformé. Siempre tienes que luchar y querer más y más".