Desde hacía semanas y todavía con Julen Lopetegui en el equipo, el Real Madrid estudiaba la posibilidad de que Antonio Conte fuese el técnico del conjunto blanco en caso de alargarse la mala racha con el entrenador vasco. Cuando se decidió su cese, se contactó con el italiano para intentar de convencerle, pero finalmente se rompieron las negociaciones.

En verano, ya había rechazado formar parte del proyecto madridista, pero el pasado noviembre Florentino Pérez volvió a intentar su contratación. El resultado fue el mismo, ya que a Conte no le convencía la idea de llegar al Santiago Bernabéu y, según El País, puso unas condiciones inasumibles para el Real Madrid.

Las condiciones de Antonio Conte

Contrato millonario

Antonio Conte está sin equipo, pero las condiciones económicas que le pedía al Real Madrid eran desorbitadas. Habría pedido un sueldo de más de diez millones de euros, a lo que había que añadir la demanda de una determinada duración del contrato que distaba de lo que Florentino Pérez proponía en un principio.

Cinco ayudantes

Antonio Conte quería tener poder absoluto en la parcela deportiva y, para ello, ataba su llegada a la de cinco de sus ayudantes. El técnico italiano no habría visto con buenos ojos las declaraciones de Sergio Ramos en las que se se puso exigente con la actitud del nuevo técnico. El ex del Chelsea lo quería tener todo bien controlado.

Gran inversión en fichajes

El entrenador italiano era consciente de que la plantilla del Real Madrid necesitaba cambios importantes y por ello habría pedido una inversión muy importante en el mercado de fichajes. La inflación de los precios actuales hace que no sea nada fácil concretar llegadas, por lo que la petición de Conte resultó ser desorbitada.

Capacidad ejecutiva absoluta en altas y bajas

El ex técnico de equipos como la Juventus de Turín y el Chelsea quería tomar el control absoluto de la planificación de la plantilla, decidiendo qué jugadores debían llegar y cuales no debían continuar en el equipo. Un poder que significaba pasar por encima de la mano de Florentino Pérez y que la cúpula blanca no habría aceptado.