La política de cesiones del Madrid fracasa con Take Kubo y Reinier

El Real Madrid decidió hace varios años apostar por intentar 'criar' a las futuras estrellas mundiales. Por este motivo, los blancos pagaron a precio de oro a tres joyas de Brasil como Vinicius Jr, Rodrygo Goes y Reinier Jesus; o apostaron fuerte por Brahim Díaz, Takefusa Kubo, Martin Odegaard o Federico Valverde. Está por ver hasta dónde llegan todas estas inversiones, pero esta es la política que claramente van a usar los merengues para poder dominar en el futuro.

Precisamente por haber fichado tanto talento joven, los madridistas se han quedado sin sitio en la plantilla. Por este motivo, los de Concha Espina están usando una política de cesiones para que sus promesas se fogueen en Primera División. Si el año pasado fueron Odegaard, Lunin o Kubo los que tuvieron que irse, este curso ha sido el turno de Brahim, Reinier o el propio japonés, que sigue sin tener sitio con el primer equipo por ser extracomunitario.

Pero la decisión de ceder a jugadores tan jóvenes no es nada sencillo, ya que siempre se corre el riesgo de que el entrenador del equipo al que se elige apueste por veteranos o por futbolistas que pertenecen al club. Pero si además el equipo en cuestión es importante, este riesgo se multiplica por dos y puede terminar siendo un fracaso. Esto es precisamente lo que está ocurriendo, al menos de momento, con las cesiones de Kubo y de Reinier.

Todavía es pronto para sacar conclusiones, ya que apenas ha pasado un mes desde que comenzó el curso, pero la realidad es que los préstamos de ambas joyas están resultando ser un fiasco total a ojos de los madridistas. En el caso del brasileño, se decidió prestarle dos años al Borussia Dortmund, como ya se hizo con Achraf Hakimi en su día. El problema es que el ex del Flamengo compite con varios de los mejores jugadores de la Bundesliga y va a tener muy complicado hacerse con un hueco.

El brasileño es mediapunta o segundo delantero, aunque también puede caer a banda izquierda. Justo en ese puesto juegan también el prometedor Gio Reyna, Jadon Sancho, Marco Reus, Julian Brandt o incluso Thorgan Hazard. De momento, está jugando muy poco, pero parece que Lucien Favre confía en él, por lo que quién sabe si podría ir entrando más en el once a medida que pasen las semanas. No obstante, parece complicado y todo apunta que podría haber sido una mala elección mandarle a Dortmund.

Kubo, sin minutos y sin la confianza de Emery en Villarreal

El caso de Kubo es aún más preocupante, ya que el nipón no tiene tanta competencia en la Cerámica. Solo Samu Chukwueze, Moi Gómez o Manu Trigueros, si se juega con trivote en el mediocampo, compiten contra él por un sitio en el once. El problema es que Unai Emery parece no confiar en su fútbol, ya que hasta ahora le ha cerrado una y otra vez las puertas tanto para jugar de inicio, como para salir de revulsivo en las segundas partes.

Take tan solo ha jugado 54 minutos entre los cinco encuentros de Liga que se han disputado, una media de menos de 11. Además, en dos de ellos solo salió cinco minutos, por lo que apenas tuvo tiempo de hacer nada. El ex canterano del FC Barcelona​ es una de las grandes joyas de esta camada que tiene el Madrid y hay puestas muchas esperanzas en él, pero necesita crecer, jugar y mejorar en muchos aspectos de su juego. Pero para que todo esto suceda Emery tiene que estar convencido y confiar en él, algo que por ahora no ha ocurrido y que podría no suceder en bastante tiempo.