¿Por qué ha quedado impune la agresión de Cristiano a Godín?

Cristiano Ronaldo pegó dos fuertes puñetazo a Diego Godín antes de derribarle al césped este pasado viernes en los minutos finales de la vuelta de la Supercopa de España. Lo hizo por la rabia e impotencia que sentía al no haber podido ayudar a su equipo a ganar el título, pero quizás también porque sabía que nadie iba a sancionarle y se saldría de rositas. Y así ha sido. De momento, absolutamente nadie de la Real Federación Española de Fútbol, la FIFA o la UEFA se han pronunciado sobre la doble agresión del portugués al central uruguayo del Atlético de Madrid; una acción que ha quedado impune a pesar de que en la repetición pueden apreciarse claramente los puñetazos.

A Luis Suárez, no hace mucho, le sancionaron con cuatro meses de inhabilitación total y nueve partidos sin poder jugar con su selección por un mordisco a Chiellini. Si bien es cierto que fue en un partido mundialista de máxima expectación y que el uruguayo ya era reincidente, resulta normal que la sanción fuera dura -aunque no desproporcionada como lo ha sido-, pero también está muy claro que es muy sospechoso que la estrella del Real Madrid, Cristiano Ronaldo, agreda en dos ocasiones en menos de un segundo a un jugador rival y salga airoso, sin ningún partido de sanción. Puede, quizás, que exista un doble rasero a la hora de valorar algunas acciones dependiendo del jugador en cuestión.