La reacción de Zidane a la provocación de Bale: No quiere guerras

La relativa calma que en las últimas semanas había recobrado el Real Madrid saltó por los aires este martes con una provocación de Gareth Bale. Durante la celebración de la selección de Gales, que obtuvo su clasificación directa para la Eurocopa 2020, el atacante y algunos de sus compañeros sujetaron una bandera del país que llevaba escrito "Gales, Golf, Madrid. En ese orden", algo que no ha sentado nada bien en la capital.

El debate que arrancó a última hora de la noche ha tenido continuidad este miércoles, que se suma apoyos y reproches a partes iguales. Unos defienden que el crack sólo estaba lanzando un mensaje velado a aquellos que le critican en la prensa española, mientras que otros consideran intolerable que además de su desesperante falta de compromiso, se ría del club, de sus compañeros y de la afición de una forma tan abierta.

En el medio de ambos bandos está Zinedine Zidane, cuya reacción se basará en su ya conocida tranquilidad. Varios medios informan que el preparador marsellés tiró la toalla hace mucho tiempo, cuando volvió al Santiago Bernabéu para sustituir a Santiago Solari. Entonces guardó silencio y únicamente lo rompió para decir que quería fuera al jugador en verano, y viendo que la jugada le salió mal, no volverá a cometer el mismo error.

El técnico tratará al delantero como uno más de la plantilla, y lo único que no tendrá será el estatus de estrella. No son pocos los que consideran que el ex del Tottenham lleva tiempo echando un pulso a la entidad 'merengue' para lograr un traspaso que desea, pero el entrenador no lo quiere jugar. Tratará de aprovechar su calidad cuanto pueda y cuando no lo vea claro le mandará al banquillo, como ha hecho hasta ahora.

El galo cree que el equilibrio será clave para que el Madrid luche por los títulos, y no quiere romperlo con guerras individuales. El equipo ha respondido con victorias y buen juego a un inicio de temporada delicado, y algunas de sus mejores actuaciones llegaron cuando Bale se preparaba para volver con su selección. Pase lo que pase, el vestuario estará protegido y sin estridencias.

Florentino no sabe que hacer con Bale

Con Zidane capeando el temporal como puede, el que ya no sabe qué hacer con Bale es Florentino Pérez, que espera una oportunidad para poder alejarle del Real Madrid. El presidente, de quien no se ha confirmado si le impondrá sanción o no, confía en obtener alguna oferta interesante para colocar a un 'galáctico' en el que invirtió más de 100 millones de euros y que se ha devaluado alarmantemente, y al que, con su currículum de lesiones, su edad y su sueldo, cada vez tiene más difícil traspasar con un beneficio que necesita.