Mané empató, pero el Madrid volvió a marcar tras una chilena de Bale

Después del garrafal error de Karius que puso al Real Madrid por delante en la final de la Champions League, Sadio Mané consiguió empatar gracias a una acción surgida en un saque de esquina. Sin embargo, un golazo de Gareth Bale de chilena volvió a poner por delante a un Real Madrid que se vio muy beneficiado por la lesión de Salah.

Cuatro minutos después de que Karim Benzema marcase el primer gol del Real Madrid después de un fallo brutal de Karius, el Liverpool sacó fuerzas de flaqueza pare empatar apenas cuatro minutos después, en el 55. El tanto vino precedido de un saque de esquina, una de las armas que Jurgen Klopp tenía estudiadas.

El lanzamiento de córner fue colgado al corazón del área y Lovren pudo cabecearlo después de elevarse más que la defensa blanca en el salto. El testarazo del defensa bosnio dejó sólo a Sadio Mané, que solamente tuvo que poner la bota para marcar a placer el empate del Liverpool, que no dejaba de creer.

El equipo de Jürgen Klopp había conseguido igualar las fuerzas ante un Real Madrid que se había aprovechado bien de la lesión de Mohamed Salah, el eje ofensivo del equipo 'red'. El Liverpool había conseguido llevar el peligro cerca de la portería de Keylor Navas, que consiguió detener las ocasiones que le llegaron.

Una chilena de Bale decidió la final

Cuando el partido parecía que se había igualado en fuerzas, llegó el jarro de agua fría del Real Madrid al Liverpool. Marcelo inició una jugada por la banda izquierda y puso un centro al corazón del área para que Gareth Bale, que había entrado sustituyendo a Isco, impactase un impresionante remate de chilena que se coló en la portería 'red'.

El Liverpool había sufrido un duro golpe justo en el momento en el que empezaba a levantar cabeza. Algo que fue ya demasiado duro y que no conseguiría levantar, en favor de un Real Madrid que conseguiría la décimo tercera Champions League de su historia después de vencer por 3-1.