El momento crucial para la selección de Argentina ha llegado: Leo Messi y sus compatriotas deberán tirar de honor para derrotar a Nigeria y esperar a que Islandia no haga lo propio con Croacia. La albiceleste se lo juega todo a una sola carta en el partido contra los africanos, que ya han demostrado que no son un rival sencillo.

La conjura de los jugadores será clave para que el equipo consiga salir adelante y lograr el billete a octavos de final. La gesta consiste en derrotar a un equipo que se ha mostrado sólido y peligroso, pero Argentina tiene motivos para creer que los octavos de final son posibles. Y más teniendo en cuenta que Leo Messi estará defendiendo los colores albicelestes.

El hecho de que el astro azulgrana juegue en la selección de Argentina hace este equipo capaz de todo y ante cualquiera, aunque hará falta cambiar la dinámica de los dos primeros encuentros. Ahora ya está prohibido fallar y la selección de Leo Messi jugará la primera final del campeonato en un partido clave para el futuro del equipo.

Jorge Sampaoli, técnico argentino, está convencido de que Argentina puede dar guerra: "Ha sido una semana difícil después de una derrota que te golpea. Estoy convencido de que el equipo saldrá con energía para ganar el partido. El mundo virtual no me genera nada pero mucha gente que tengo cerca es parte de ese mundo. Les digo que aquí lo único que nos compete es que tenemos que trabajar de manera real y sentimiento para lograr nuestro objetivo".

El seleccionador se mostró optimista con el equipo: "Estoy convencido de que se escribirá una nueva historia para esta selección, tenemos argumentos para conseguir nuestro objetivo. Perder un partido de fútbol te hace un perdedor, te hacen sentir como un delincuente en el mundo virtual… Mi mundo real es ser un entrenador con entusiasmo, si entrase en ese mundo virtual dejaría la profesión".

Leo Messi, clave

Sampaoli también recalcó la importancia de Leo Messi: "Esperamos que Leo, por el bien de Argentina, toque más balones que en el partido contra el Croacia. Cuando se pierde hay acusaciones recíprocas. En el mundo real las cosas se dicen de frente, se intentan arreglar por el bien del escudo. En mi aprendizaje como entrenador siempre aprendí todo de mis jugadores y por eso hablo mucho con ellos. Tengo la confianza y la seguridad de que Argentina empezará a vivir el Mundial de otra forma".