Se lesionó a principios de temporada y después de forzar para volver no ha sido el mismo. Existía cierta preocupación sobre el problema de rendimiento de Luis Suárez, y aunque podría estar relacionado con su estado físico, no hay consenso con las soluciones para su dolencia. Mientras que unos aseguran que debe operarse, otros aseguran que no es necesario.

En este último grupo está el médico de la selección de Uruguay, Alberto Pan, que ha asegurado en la emisora '1010' de su país que un quiste sinovial no tiene porqué desembocar en el quirófano, dejando claro además, que en todo momento están en comunicación con el Barça. "Ellos ya estaban tratando el quiste meniscal, que es una patología que es muy frecuente en los futbolistas. Está relacionada con lesiones en el menisco externo y no recibe tratamiento quirúrgico en el mayor de los casos", ha explicado.

"Estamos frente una situación controlada y su tolerancia marcará lo que pase en los próximos partidos. Si tiene molestias, se orientarán las decisiones adecuadas. Hoy por hoy no necesita tratamiento terapéutico", ha insistido el charrúa, sembrando las dudas respecto a las intenciones del club con el jugador, que podría haber programado una intervención para el próximo mes de noviembre.

El Barça, preocupado

Si algo está claro después de un inicio de curso impecable, es que en el Barça hay cierta preocupación por el estado físico de sus futbolistas. Con Dembélé y Rafinha en el dique seco durante una larga temporada, los catalanes no quieren ver como la plantilla se debilita todavía más a causa de las lesiones.

Las jornadas de clasificación para el mundial no están dejando un balance nada esperanzador para el club, que ha visto como varios de los integrantes del vestuario se juegan el todo por el todo con sus selecciones. La situación se agrava en comparación con el Real Madrid, que respira optimismo ya que, aparte de Gareth Bale, que no pudo participar con Gales, el parón le vendrá bien para recuperar efectivos.