Esta Champions demuestra lo mucho que necesitaba el Barça a Bernardo Silva

El FC Barcelona tiene muy, muy caro pasar a los octavos de final de la Champions League. El equipo entrenado por Xavi Hernández no pasó del empate en la visita del Inter de Milán al Spotify Camp Nou en un partido que dejó muchos señalados y una profunda decepción porque puede pasar lo que tanto había temido el equipo: quedarse fuera en la fase de grupos del torneo continental nuevamente. Sería un bajón histórico para la entidad azulgrana. 

Los culés se guardan una última bala: que el Inter de Milán no gane al Viktoria Plzen y que los culés se impongan ante el Bayern de Múnich. Es un escenario muy, muy complicado, porque el Barça no depende de sí mismo y le tocará ver con muchos nervios el partido del martes en el Giuseppe Meazza (18:45 horas CEST) para ver si, a las 21:00 horas, todavía tiene oportunidades de colarse en la siguiente ronda. 

El choque ante el cuadro 'nerazzurri' ha dejado muchos señalados y dejó en entredicho el rendimiento del equipo en lo que va de temporada. Y es que, si bien los culés tienen una de las plantillas más completas de Europa, aún tienen que compaginarse entre sí y no es algo que pasa en tres meses. El camino todavía es largo (pero expectativas fueron muy altas, también) y queda en el aire la 'duda' de si el Barça necesitaba en el verano una pieza más... y todos los focos están en Bernardo Silva.

El portugués, más allá de Lewandowski o Koundé, era la gran obsesión de Xavi en el verano, pero era una operación directamente imposible por el factor económico. Silva, en cualquier caso, tenía todas las papeletas para encajar en el sistema del entrenador egarense y 'manejar' el centro del campo azulgrana junto a Pedri González. Era la oportunidad de juntar a dos 'locos' del juego ofensivo que stienen buena técnica, que son capaces de sumarse al ataque, marcharse de rivales, llegar desde segunda línea... 

Y es que ahora, en cuanto a roles, Pedri se ve muy solo a la hora de generar superioridades en el centro del campo. Se ha convertido en el único capaz de darle sentido al juego del Barça. Contra el Inter quedó más que evidenciado la capacidad de los culés de conectar entre líneas e imponerse desde la medular. Sergio Busquets no fue capaz de organizar el juego y dirigirlo, mientras que el dinamismo de Gavi no es 'suficiente' para lo que quiere Xavi en su juego. 

Una pieza 'extra' ya es necesaria

El Barça experimentará muchos cambios, probablemente, desde la pizarra. Xavi Hernández está obligado a darle un vuelco a su equipo y, sobre todo, que sepan imponerse mentalmente. Algo que fue imposible contra los italianos. Pero tampoco hay dudas de que, a corto o mediano plazo, los azulgrana necesitarán a un jugador para que el equipo vuelva a ser ordenado con el balón... y pueda compensarse.