A tres días para el debut del FC Barcelona en LaLiga, el futuro de Frenkie de Jong sigue en el 'aire'. El miércoles, el centrocampista fue recibido en medio de insultos verbales en la Ciutat Esportiva, donde se entrenó con normalidad junto a sus compañeros. Un grupo de aficionados fue captado por las cámaras de 'SPORT' gritando improperios contra el centrocampista, exigiéndole bajarse el sueldo para que pueda continuar en el club, como desea el jugador de 25 años.
Sin embargo, más allá de su insistencia por descartar las ofertas de Manchester United y Chelsea, el de Arkel sigue reacio a aceptar baja su ficha, principal condición de la directiva del Barça para que pueda quedarse. Los problemas del club con el 'fair play' financiero de LaLiga debido a su elevada masa salarial hacen que, de momento, no hay sido posible inscribir a ninguno de los cinco refuerzos fichados en verano. De ahí que, para el club, lo mejor sea venderle.
La situación es tan compleja con respecto a la inscripción de los refuerzos que el miércoles salió a la luz una clásula por medio de la cual Andreas Christensen y Franck Kessié, primeros jugadores fichados para la 2022-23, podrían marcharse libres ante la imposibilidad del Barça para incluirles en la nómina oficial de LaLiga. Mientras tanto, Frenkie se mantiene al margen de las críticas y solo piensa en entrenar y llegar a tope al debut liguero el sábado ante el Rayo Vallecano.
Mientras el jugador se entrenaba en la Ciutat Esportiva el miércoles, Mateu Alemany y su agente, Ali Dursun, siguen en conversaciones para resolver el 'culebrón' en el que se ha convertido el futuro del neerlandés. Con un salario neto de 14 millones de euros fijado en su contrato inicial firmado en 2019, la directiva ve como imposible pagar el sueldo íntegro del centrocampista si quiere inscribir a Christensen y compañía. Los números no cuadran y el tiempo se acaba en Can Barça.
La novia de Frenkie enciende las redes con un enigmático mensaje
Mientras la directiva continúa presionando a Frenkie para aceptar las condiciones que impone el club y un sector de la afición comienza a perder la paciencia con el tulipán, su novia, Mikkie Kiemeney, posteó un mensaje en su cuenta de Instagram que alimentó las especulaciones sobre el futuro de De Jong. "Y, mientras tanto, viviendo nuestra mejor vida", posteó Kiemeney en Instagram stories.
El mensaje iba acompañado de un vídeo en el que Frenkie aparece manejando su coche y en varias actividades recreativas en la playa, denotando lo bien que ambos se han adaptado a la vida en Barcelona. Con el Chelsea pujando fuerte por su traspaso y el Manchester United resignado a bajarse de la 'carrera', el futuro del centrocampista es totalmente incierto. Lo único seguro es que el jugador quiere seguir en el Barça. Por lo demás, cualquier cosa puede suceder de aquí al final del mercado el 1 de septiembre.