En mitad del seísmo que ha afectado a la directiva del FC Barcelona durante los últimos días, este miércoles se ha conocido otra noticia negativa para la cúpula de Josep Maria Bartomeu, a pesar de que sobre el papel no tiene nada que ver con el caso del 'Barçagate'. Y es que Montserrat Font, con cargo en el FC Barcelona desde el año 2005, no continuará en el club a partir del mes de marzo.

La hasta ahora directora financiera del Barça ha anunciado su marcha para aceptar una oferta profesional, en una decisión que estaría tomada desde hace semanas pero que, según fuentes del club, se comunicó ayer de manera interna en la entidad culé. La dimisión es de “carácter irrevocable”, tal y como ha informado en las últimas horas el diario 'El Triangle'.

En Can Barça ya habrían encontrado la forma de remodelar el área de finanzas a nivel técnico, cuyo máximo responsable es el director corporativo Pancho Schroder. Montserrat Font fue contratada en 2005 cuando Anna Xicoy era la directora general del club, presidido por aquel entonces por Joan Laporta.

Al parecer no estaba de acuerdo con planteamientos estratégicos propuestos y validados por Schroder y el vicepresidente económico y tesorero del club, Enrique Tombas, y ello habría impulsado la aceptación de una oferta profesional para dejar su cargo actual. Font trabajó anteriormente en el Departamento de Planificación y Control de Menta (Cable i Televisió de Catalunya), de 1996 a 2004.

La posición de Bartomeu, muy debilitada

Ahora se abre para ella un nuevo horizonte laboral, al tiempo que en el FC Barcelona intentarán calmar las turbulencias que se están viviendo desde hace días en el club. El panorama no pinta bien para la directiva de Josep Maria Bartomeu, cuya imagen ha caído en picado entre los socios culés y el barcelonismo más acérrimo, cada vez más crítico con sus decisiones.

En este sentido, la opción continuista de Emili Rousaud podría verse perjudicada de cara a las elecciones generales que vivirá el club en 2021. Rivales como Víctor Font, por el contrario, se están viendo cada vez más beneficiados con la controversia generada a nivel institucional y deportivo.