EXPERIMENTO ante el huesca
Así le fue al Barcelona con el innovador 3-5-2 de Valverde
Publicación:13/04/2019 - 18:02h
Actualización:13/04/2019 - 18:03h
En el partido contra el Huesca, Ernesto Valverde no solamente armó una revolución en cuanto a los jugadores que formaron la alineación, sino también en el sistema de juego. El Barça jugó en El Alcoraz con tres centrales, dos carrileros largos y dos delanteros
Ernesto Valverde era consciente de que este sábado era el día ideal para hacer experimentos. El 'Txingurri' necesitaba dar descanso a los titulares habituales, que jugaron en Old Trafford y que deben llegar en plena forma al partido de vuelta, que se disputará el próximo martes. Ante el Huesca, hubo revolución total.
El cambio radical no fue solamente en cuanto a los jugadores -solamente repitió Marc-André ter Stegen respecto a Old Trafford- sino también en el esquema de juego. Valverde apostó por prescindir del 4-3-3 habitual y optó por jugar con un 3-5-2, con tres centrales, dos carrileros profundos, y dos delantero por la línea de centrocampistas.
El partido era una prueba de fuego, con una alineación llena de jugadores que nunca habían jugado juntos y el invento no fue ni un desastre ni un gran acierto. Durante el primer tiempo, el FC Barcelona no sufrió en defensa ante un Huesca inofensivo, pero tampoco fue capaz de generar demasiadas jugadas de peligro más allá de un mano a mano de Dembélé tras un gran pase de Riqui Puig.
En el segundo tiempo, el equipo azulgrana pareció estirarse más y generar alguna que otra ocasión de peligro. De hecho, Valverde mantuvo el 3-5-2 incluso cuando introdujo cambios en el segundo tiempo, momento en el que entraron al terreno de juego Philippe Coutinho, Jordi Alba y Arthur Melo. Pese a ello, pocas conclusiones se pudieron sacar del esquema con un once sin titulares.
Así se adaptaron los jugadores del Barcelona
Los jugadores se adaptaron de forma dispar a sus nuevos roles. Especialmente destacable fue la actuación de Malcom como falso lateral izquierdo, siendo un carrilero con mucha proyección ofensiva que sorprendió por su banda. En la línea defensiva también destacaron Todibo y Umtiti, interpretando bien su rol tanto defensivo como en la salida de pelota. Wagué también se incorporó bien por la derecha.
En el centro del campo, Arturo Vidal jugó de mediocentro, donde habitualmente juegan Sergio Busquets o Ivan Rakitic, y se notó que le faltó libertad para desplegarse en ataque. En la medular, Rique Puig mostró destellos de clase por encima de un Aleñá algo gris. En la delantera, Kevin-Prince Boateng apenas apareció y Dembélé pudo marcar, pero parece que es más efectivo desde la banda.
