Con unas ganas enormes de jugar y de responder a lo que el FC Barcelona pagó este pasado verano por él, alrededor de 140 millones de euros, Ousmane Dembélé dispuso este jueves de 20 minutos para protagonizar su 'redebut' con la camiseta azulgrana.

El talentoso futbolista francés apareció sobre el césped de Balaídos en sustitución de José Arnáiz, asediado por los calambres, para colocarse en la punta del ataque y no en banda, la que teóricamente es su posición natural. Pero las ausencias de Leo Messi, Luis Suárez y Alcácer provocaron que Dembélé se situara en dicha zona del flanco de ataque, reencontrándose con las sensaciones propias de un futbolista de élite.

De esta manera Dembélé reapareció en un once del FC Barcelona, con 108 días después de que cayese lesionado contra el Getafe en partido de Liga Santander 2017-18. Le costó algunos minutos entrar en juego y tocar el balón, debido a la férrea marca de los jugadores contrarios.

Dembélé necesitará algo de tiempo

El primer balón que tocó, además, lo envió directamente fuera cuando intentó combinar en profundidad con Denis Suárez, que se incorporaba al ataque. Y es que Dembélé necesitará un tiempo para habituarse de nuevo al juego tras la primera lesión grave de su carrera, y también para adaptarse a un FC Barcelona en el que apenas ha jugado tres partidos.

De lo que no hay duda es de que todos sus compañeros le ayudarán en la plantilla azulgrana, con el objetivo de que se sienta lo más cómodo posible en el vestuario y también con las ideas claras sobre los terrenos de juego. A sus 20 años, Dembélé no tiene techo.