La lesión sufrida por el portero alemán de Marc-André Ter Stegen en el curso pasado y que le obligó a incorporarse no desde inicio en el presente curso con el FC Barcelona parece haberle marcado y desde entonces no ha vuelto a ser el mismo de antes. Llegó a ser considerado como uno de los mejores tres porteros del mundo, pero ahora solo ha tenido actuaciones opacas en la temporada. Se especula que esté en la parrilla de salida del cuadro azulgrana. No solo por su rendimiento, sino también ante la necesidad de hacer caja.  

Se trata de una situación similar a la del centrocampista neerlandés Frenkie de Jong. Además, la presión para él ha subido con la irrupción de Gavi y su buen rendimiento con el sistema táctico más utilizado (4-3-3). Gavi y Busquets han ofrecido un gran nivel y en el Barça esperan que, mientras Pedri se ausente, el ex Ajax pueda mejorar su fútbol jugando como interior. Sin embargo, sigue hundiéndose de a poco en el ostracismo.   

Un ejemplo de su bajón es el partido ante el Dynamo de Kyev (0-1) por la UEFA Champions League. Ese día, acompañado de Gavi por la izquierda y Sergio, por el centro, Frenkie sufrió mucho porque el equipo ucraniano jugó muy reculado con la defensa -Kedziora, Zabarnyi, Syrota y Mykolenko- pegada al centro del campo. Y se destaca la actuación de Sydorchuk, Shaparenko, Tsygankov, Buyalskiy y De Pena, eliminando los espacios.  

Necesitan vender 

Para nadie es un secreto que el FC Barcelona no está capacitado para ir por grandes estrellas como el noruego Erling Haaland o Kylian Mbappé, pero han trabajado en silencio el fichaje de Karim Adeyemi, delantero zurdo del Red Bull Salzburg, de 19 años de edad. Se trata del futbolista mejor perfilado para reforzar el cuadro azulgrana que ha comenzado a construir Xavi Hernández. Sin embargo, igual deben invertir. En este punto, es donde resalta la necesidad de buscar a las fichas con más mercados y venderlos, como Ter Stegen y De Jong.  

Desde la prensa que sigue las incidencias del FC Barca, se especula que la prioridad de Xavi y su cuerpo técnico pasa por encontrar uno o dos extremos de garantías, desequilibrantes y con gol. Adeyemi y Coman, del Bayern Múnich, son los más sonados. Sin embargo, el Barça debería invertir unos 100 millones de euros, una cantidad que ahora mismo no disponen y que la obtendrían con la venta, precisamente, de Ter Stegen y De Jong.