Viendo todos los traspiés recientes de los azulgranas, el presidente del Barcelona, Joan Laporta, sabe que la afición del Barcelona necesita un estímulo que los anime a volcar todo su apoyo al club. Algo que les dé a los hinchas una nueva ilusión que los haga dejar atrás los fiascos de los últimos días. Laporta recuerda muy bien su primera etapa y, a pesar de la compleja situación, parece ver posible volverlo a hacer.

En 2003, Joan Laporta ganó las elecciones del Barça y arrancó su primera etapa como presidente, aunque su comienzo como el máximo directivo de la escuadra catalana no fue el mejor. El equipo, que entonces dirigía Frank Rijkaard, deambulaba por LaLiga sin pena ni gloria y su clasificación para la Champions League estaba en tela de juicio.

Llegado el mercado de invierno de aquel entonces, Laporta buscó soluciones y apostó por la cesión de Edgar Davids, quien llegó al Barcelona cedido por la Juventus.  El centrocampista holandés llegó a encajar a la perfección en el equipo y le proporcionó a los culés un giro de 180 grados a la situación que tenía en ese entonces el primer equipo. Con él como titular, el Barça encadenó nueve victorias consecutivas y 15 partidos invictos.

En total, Davids jugó 18 partidos en los que consiguió 13 victorias, tres empates y solo dos derrotas. Su peso fue tal que llegó a ayudar al equipo a subir hasta la segunda posición cuando atravesaba un terrible momento. En estos momentos, Laporta vive una situación similar a la que los blaugranas vivieron en aquella ocasión.

La situación actual

El equipo de Ronald Koeman lleva una mala racha de resultados en tanto en Europa como en España y no parece que vean mejoría respecto al estado actual. En el club son optimistas con la recuperación de los delanteros de más peso como Ansu Fati y próximamente Agüero, Dembelé y Martin Braithwaite.

A pesar de que consideran que estas y otras bajas son un factor a considerar en el bajón que han sufrido los de Koeman, la dirección deportiva del club considera que deben fichar a un jugador contrastado. Las ordenes ya se han hecho saber y Laporta se muestra confiado en conseguir volver a fichar a otro “Edgar Davids” que ayude a invertir los papeles actuales de la escuadra catalana.