Las 'locuras' de Víctor Valdés con Balde e Ilaix Moriba que 'empujaron' al Barça a despedirle

Tal y como era sobre el campo cuando fue jugador, Víctor Valdés intentó también tener su propio estilo como entrenador dentro del FC Barcelona. El exfutbolista asumió el banquillo del Juvenil A, pero acabaron siendo poco más de 10 semanas de mucha tensión y poca alegría. El catalán intentó revolucionar el juvenil A con un método de preparación 'Futtack' que entraba en conflicto con la metodología de La Masia, y la situación continuó empeorando.

Valdés iba por libre con el sistema, desmarcándose a menudo del 4-3-3 clásico del resto de equipos del fútbol base. "Haremos un futtack con mucho gas, muy dinámico, asumimos riesgos y vamos a por el gol", dijo en una de sus primeras ruedas de prensa. Pero todo fue más allá cuando intentó utilizar a Alejandro Balde como extremo derecho o Ilaix Moriba como delantero centro, un día en el que se estrenaba el Estadi Johan Cruyff ante el Ajax.

Experimentos y problemas de carácter por parte de Víctor Valdés

Varios jugadores ocupaban posiciones con las que no estaban familiarizados aquel día y finalmente esos métodos del técnico incomodaron al club porque se alejaban de la hoja de ruta de todo el club. Además, el carácter de Valdés también fue desgastando a personas que trabajaban habitualmente con él. Una de las relaciones más tensas fue con Kluivert, entonces director del fútbol formativo.

Valdés terminó siendo despedido tras ser apartado por un encontronazo con Kluivert. El exportero tuvo una discusión subida de tono con y esa reunión hizo que los responsables azulgrana decidieran romper el contrato dos meses después de firmarlo. A pesar de su importancia dentro de la entidad, el Barça priorizó su filosofía formativa que tanto éxito ha tenido y acabó dejando ir a Valdés, lejos aún de poder cumplir al menos la mitad de esa primera temporada en el Juvenil A.