Kays Ruiz llegó al FC Barcelona B en agosto de 2021 como una de las principales apuestas a futuro de la institución. El centrocampista de 19 años culminó su contrato con el París Saint-Germain y llegó a Catalunya a coste cero, pero apenas ha disputado minutos en cinco partidos en la temporada y el míster Sergi Barjuán parece haber perdido la paciencia con el galo.

En la rueda de prensa posterior al empate del Barça B ante el UCAM Murcia (2-2), el de Les Franqueses fue consultado por la escasa participación y el momento de Ruiz, quien ingresó en el minuto 88 del partido del sábado. Sergi solo se limitó a contestar "depende de él", con respecto a si al centrocampista podría irle mejor en el equipo. Tras unos instantes de silencio, el míster dio por terminada la charla con los medios.

El conjunto culé saltó al campo La Condomina con hasta 10 bajas, seis de ellas por lesión y una por COVID, además de los citados por el primer equipo (-Jutglà, Balde y Abde). Sin embargo, Kays apenas ingresó sobre el final solo por el riesgo de expulsión de Matheus Pereira, quien se había jugado la roja en una fuerte entrada minutos antes. 

Está claro que tanto Sergi como la directiva quieren resolver el caso del centrocampista nacido en Lyon. A una semana para el cierre del merado invernal, una cesión por seis meses sería la mejor alternativa, pero de momento no se han conocido ofertas por Kays. Lógicamente, su inactividad pesa para encontrarle 'novias'.

Problemas de adaptación y mala fortuna

Kays Ruiz no ha visto luz desde su llegada a Barcelona. Recién pisó la Ciudad Deportiva dio positivo por COVID y por ello no pudo hacer la pretemporada con el equipo. A partir de entonces apenas se le ha visto sobre el campo y la directiva trabaja desde finales de octubre para buscarle salida, consciente del error cometido al ficharle.