Una de las preocupaciones más grandes dentro del FC Barcelona es el tema económico y lo saben todos en el mundo del fútbol, desde el más nuevo en el ecosistema culé como el más veterano en su historia, comenzando por Xavi, que llegó con el sueldo de 2.9 millones de euros al menos para su primera temporada como entrenador.

El nombre del ex jugador del club se une a la lista de Piqué, Busquets, Sergi Roberto y Jordi Alba, capitanes del equipo que ya se rebajaron su ficha como ejemplo para los demás jugadores. El nuevo técnico del equipo espera poder extender el mismo mensaje de consideración con la institución a sus dirigidos.

Para apretar un poco con las rebajas Xavi tiene como plan de acción el estar muy cerca de Jordi Cruyff, experto en la gestión de equipos y con mucha experiencia en las actividades institucionales. El resultado de esta unión podría ser positivo para un vestuario en el que ya ven la renovación de Dembélé como posible.

Por debajo de la competencia

En el Barcelona los sueldos también estaban en la élite de Europa hasta hace poco, pero la mala gestión de Bartomeu generó un hueco sin fondo que tuvo la pésima fortuna de unirse al bajo rendimiento de jugadores como Coutinho, que se llevó gran parte del dinero ingresado en la venta de Neymar al PSG.

Así como la cima la marcaban los catalanes, ahora es el fondo el que se ve de a poco y Xavi muestra de ello, porque su salario estará muy lejos de lo que sus competidores suelen ingresar al menos en cuanto a clubes de primera línea, que tendrán al ex mediocampista como el último de la lista.

A futuro sería complicado pensar que no habrá modificaciones en este apartado del contrato del nuevo entrenador, ya que tras dejar Catar en medio de una comodidad irrepetible, llegó para hacer levantar el ánimo, nivel deportivo e imagen de un club al que le llevó él mismo a la gloria junto a la mejor camada que se recuerde en el Barcelona.