Si bien hay varias personalidades dentro del Valencia CF que están por la labor de cumplir con el acuerdo verbal que el Barça tiene con Paco Alcácer y que el delantero acabe reforzando el cuadro azulgrana este verano, hay tres actores principales que se niegan en redondo. Una es la presidenta, Lay Hoon Chan, otro el secretario técnico, Suso García Pitarch, y el último, y no menos importante, es el entrenador del equipo valenciano. Pues como quedó demostrado, Paco Ayestarán ni se plantea perder al delantero.

"La presidenta dijo que no se vendía y si lo dice la presidenta, me lo creo", afirmó Ayestarán ante las preguntas de los periodistas en la rueda de prensa posterior a la dura derrota que la UD Las Palmas le infringió al Valencia en Mestalla el pasado lunes. Un encuentro donde muchos aficionados recibieron a Alcácer entre pitos y aplausos, dejando clara la división que actualmente existe en el club por este asunto.

Ayestarán es el actor principal en la presión que se ejerce desde el interior hacia Peter Lim, máximo accionista y partidario de la salida del canterano. El entrenador, sin embargo, está muy en contra de ello y prefiere que se quede el joven atacante a que se vaya y tengan que salir al mercado a por un refuerzo para su posición.

Los nombres que han ido saliendo para ello, si bien son muy interesantes, se disparan de lo que el equipo valenciano, Fair Play Finaciero mediante, puede permitirse. Por ello ha dicho adiós a Juan Mata pero no descarta la incorporación de un hombre importante como Lucas Pérez, del Deportivo de la Coruña. Todo, siempre y cuando Alcácer abandone la entidad. Habrá culebrón para estos últimos días de mercado de fichajes 2016.