Grandes clubes como el FC Barcelona o el Real Madrid empiezan a tener claras sus listas de prioridades de cara a las ventanas de fichajes​ de 2020. Se prevé un mercado movido por la gran cantidad de cracks emergentes y por las necesidades de los 'grandes' para hacer sus plantillas más competitivas de lo que ya son.

De todos esos grandes clubes con predisposición de fichar, hay uno que podría ser el gran protagonista en este 2020: el Chelsea de Roman Abramovich. El conjunto londinense no pudo fichar el pasado mercado de fichajes de verano por la sanción que le impuso la UEFA a raíz de irregularidades en el fichaje de menores y solamente pudo incorporar a Christian Pulisic porque ya estaba atado.

En principio, el conjunto inglés estaba también sancionado de cara a este mes de enero y no podía fichar hasta el próximo julio, pero el Tribunal de Arbitraje Deportivo (TAS) ha decidido rebajarle la sanción a la mitad. O, dicho de otra forma, el próximo mes de enero el Chelsea ya será libre de incorporar jugadores y podrá gastarse todos los millones que no gastó en verano.

A día de hoy, el equipo 'blue', dirigido por Frank Lampard, tiene una plantilla de mucha calidad, aunque también muy joven y falta de experiencia en algunos casos. El equipo pinta muy bien de cara al futuro, pero no parece que desde Londres vayan a esperar para reforzar al equipo con jugadores importantes que eleven el nivel.

El regreso del Chelsea, un problema

El gran problema que el Chelsea ocasionará en el mercado con su irrupción será que, debido a su gran capacidad económica acumulada, tendrá dinero para ir a por grandes futbolistas y, consecuentemente, podrá encarecer operaciones que otros clubes tengan entre ceja y ceja. El FC Barcelona podría ser una de las víctimas de la llegada de los londinenses.

Hay que recordar que la secretaría técnica encabezada por Éric Abidal trabaja en las incorporaciones de futbolistas importantes como Lautaro Martínez o Fabián Ruiz (aunque el Real Madrid parece el favorito para llevarse al andaluz), operaciones que podrían complicarse económicamente y subir de precio si el Chelsea también se lanza a por ellos.