Ferran Torres no estará en la lista de transferibles del FC Barcelona este verano. Salvo sorpresa, el delantero español continuará en el club, al menos, una temporada más, siendo una de las primeras apuestas de Joan Laporta en su segunda etapa como mandatario culé. El Barça pagó 55 millones de euros al Manchester City por su traspaso, siendo el segundo fichaje más caro de la actual gestión, solo superado por Raphinha (58M€).

Y es que, más allá de las dudas que el de Foiós sembró la temporada pasada, en la 2023/24 ha demostrado compromiso y entrega desde la pretemporada. Ferran suma 11 goles y 4 asistencias en 32 partidos, siendo el segundo máximo goleador del Barça en el curso. A diferencia de la 22/23, el valenciano ha aprovechado muy bien las oportunidades que Xavi Hernández le ha brindado, con buenas actuaciones en el rol de extremo de delantero centro.

La polivalencia, la mejor arma de Ferran en el Barça

En ese sentido, la directiva tiene claro que, gracias a su polivalencia, el '7' es una pieza muy valiosa para la plantilla culé. Torres puede jugar como extremo por ambos costados, como '9' o como segunda punta sin problemas, características que le diferencian del resto de delanteros de la plantilla. A pesar de su lesión en el muslo derecho, el club confía en que Ferran seguirá siendo valioso una vez regrese a la acción.

Otro factor clave para apostar por la continuidad de Ferran es su juventud y madurez. El de Foiós cumplirá 24 años el próximo 29 de febrero y ha demostrado carácter desde su llegada, entendiendo su rol en la plantilla y siempre dispuesto a ayudar al equipo. En la 22/23 acumuló varios partidos para el olvido, pero Xavi le ratificó la confianza y el futbolista ha respondido de la mejor manera. De ahí que, más allá de la inminente salida del egarense y los problemas para fichar, el club descarte utilizarle como moneda de cambio.