Erik ten Hag ha tenido el peor comienzo posible como entrenador del Manchester United. Los 'red devils' son colistas tras dos jornadas, con dos derrotas y un gol average de -5, producto de la derrota en el debut en casa ante el Brighton (1-2) y la dura goleada sufrida en campo del Brendfort (4-0). La pésima actualidad deportiva del club, sin duda es el principal obstáculo para cerrar fichajes, entre ellos el de Frenkie de Jong, su principal objetivo.

La directiva del United ha intentado convencer al centrocampista del FC Barcelona de marcharse a Old Trafford, pero la idea de jugar la Europa League (en lugar de la Champions con el Barça) no termina de convencer al de Arkel. Mucho menos lo hará el momento que atraviesa el club, con un vestuario dividido y un cuerpo técnico recién llegado que ha heredado múltiples problemas de la temporada anterior, donde ni Ole Gunnar Solskjær ni Ralf Rangnick lograron levantar el rendimiento de un equipo en caída libre.

"Es difícil para mí, una sorpresa. El equipo tiene que asumir la responsabilidad y lo siento por la afición, los dejamos abajo", dijo el ex entrenador del Ajax tras la humillante goleada ante el Brendfort. En ese sentido, Ten Hag admitió que el equipo debe reforzarse si quiere volver a competir. "Necesitamos nuevos jugadores y jugadores de calidad. Intentaremos convencerlos para que se unan", dijo el técnico neerlandés.

No obstante, esto no será nada fácil para el United. Por más dinero que la directiva ponga sobre la mesa y que el 'ManU' sea un equipo grande, pocos jugadores querrán sumarse a un proyecto deportivo que parece destinado al fracaso. Además, las fracturas en el vestuario son cada vez más evidentes, con un Harry Maguire que inexplicablemente sigue siendo titular y capitán y jugadores hartos y urgidos por marcharse, como es el caso de Cristiano Ronaldo.

Frenkie aún no ve clara su salida

Más allá del interés del Chelsea, una alternativa mucho menos tormentosa que el Manchester, el jugador de 25 años sigue sin tener clara su salida. Para De Jong, la prioridad siempre ha sido seguir en el Barça, pero la presión de la directiva culé para que acepte bajarse el sueldo o ser transferido a otro club le han molestado mucho. De ahí que su salida no esté descartada, algo que el centrocampista ya ha dejado saber a sus compañeros. Eso sí, a este United, es casi imposible que Frenkie y cualquier jugador 'top' acepte ir.