Del mismo modo que pasó en verano de 2019, el FC Barcelona también planea una inversión importante para reforzar la plantilla de cara al de 2020. El club azulgrana tiene varias vías abiertas con varios nombres que gustan y por los que se hará un esfuerzo económico importante. A día de hoy, en la lista de la secretaría técnica aparece Lautaro Martínez como prioridad junto a Neymar como sueño.

El fichaje de Lautaro genera bastante consenso: se trata de un '9' contrastado que ha demostrado su tremenda calidad e instinto goleador en el Inter de Milán, es joven (22 años) y su precio es cerrado, con una cláusula de rescisión de 111 millones de euros. Es por ello que, según las informaciones publicadas por Mundo Deportivo, la llegada del argentino condicionará la del delantero que llegue este mes de febrero.

En primer lugar, condicionará en la planificación deportiva. Lautaro es un '9' que se sumará a Luis Suárez de cara a la siguiente temporada, por lo que la posiciónm estará completamente cubierta con el uruguayo y, en caso de cerrarse, el argentino. Si no llega el crack del Inter, llegará otro delantero contrastado, pero la idea es un futbolista joven que pueda ser el relevo generacional del ariete de Salto.

Es por ello que, el delantero que llegue este mes de enero para ocupar la ficha vacante de Ousmane Dembélé, no será un '9', sino un delantero versátil que pueda ocupar también los costados, en un perfil similar al de Rodrigo Moreno. Traer un delantero centro puro a estas alturas podría generar 'overbooking' en la posición de cara a la próxima temporada, por lo que se optará por alguien polivalente.

Condicionamiento económico

Naturalmente, el condicionamiento que provocará la llegada de Lautaro, la de Neymar o la del delantero contrastado que llegue, también será económica. Como hemos comentado antes, la inversión será grande, posiblemente superior a los 100 millones de euros, por lo que a día de hoy el FC Barcelona no puede condicionar su economía ni siquiera con una cesión con compra obligatoria. 

La situación del Barça es límite; los clubes lo saben y querrán sacar tajada de una situación muy golosa para engrosar sus arcas. El club culé, por su parte, planea un fichaje que no exceda el tope marcado por las condiciones financieras actuales: 15 millones de euros. El condicionamiento deportivo y económico es evidente de cara al fichaje del '9' y la dirección deportiva trabajará sobre ello.