Hace ya unos meses que empezó su remodelación del centro del campo, y en la agenda del FC Barcelona no dejan de apuntarse objetivos. Frenkie de Jong y Adrien Rabiot continúan siendo los dos nombres subrayados en rojo para la secretaría técnica azulgrana, pero hay otros que van cogiendo fuerza y que podrían ser opciones igualmente válidas.
Entre ellos se encuentra otra joven promesa, un Tanguy Ndombèlé que ha crecido mucho en el Olympique de Lyon y que ha asomado la cabeza a la selección francesa absoluta. El de Longjumeau tiene 21 años y un tremendo potencial por explotar, que de momento se basa en unas cualidades más ofensivas que defensivas y en una técnica, talento y velocidad que le otorgan un margen de mejora destacable.
El interés de varios grandes equipos europeos, entre los que se cuenta ya a los culés y al Manchester City, ha llegado al Parc Olympique Lyonnais, donde se han producido las primeras reacciones respecto a un posible cambio de aires. Cuestionado sobre un adiós a la Ligue 1 en el próximo mercado veraniego, el centrocampista confesó en 'L'Équipe' que "no cierro la puerta a ningún club".
Eso sí, también recalcó una advertencia que suele ser habitual cuando se trata de los lioneses, añadiendo que "es el presidente el que decidirá el final". Jean-Michel Aulas es un viejo conocido por sus grandes dotes negociadoras, y con el futbolista renovado hasta 2023, es de esperar que tensará la cuerda para que, si hace las maletas, deje un buen pico en las arcas de la entidad.
Tras los primeros acercamientos de Éric Abidal, que guarda buenas relaciones con los reponsables de un conjunto en el que militó durante tres temporadas en su etapa como jugador, el Barça sabe que el precio de Ndombèlé oscila alrededor de los 60 millones de euros. No es una opción barata, pero por sus cualidades deportivas hay que tenerla muy en cuenta.
El Barça confía en el caso Umtiti
El precedente más reciente en las negociaciones entre el Barça y el Lyon supuso una gran alegría para los azulgrana, porque acabó con Samuel Umtiti en el Camp Nou. El de Yaundé aterrizó en la Ciudad Condal siendo prácticamente un desconocido, y en pocos meses se consolidó como uno de los mejores centrales del planeta. Además, por el módico precio de 25 millones de euros, una auténtica ganga considerando que ahora se paga por algunos defensas más del triple de esa cifra. Habrá que ver si la jugada no se repite con Ndombèlé.