El buen momento del FC Barcelona tras las modificaciones de Koeman ahora pasa por un momento crítico y debe recurrir a las remontadas heroicas si desea sumar algún título al final de la temporada. La regularidad parecía haber vuelto, pero los tropiezos obligan a no cometer fallos en los próximos encuentros.

De todos los títulos en juego, quizá el menos complicado sea el de la Copa del Rey. Una vez fuera el Atlético y el Real Madrid, todo parecía que los de Koeman no tendrían dificultades para hacerse con el título. Sin embargo, el Sevilla de Lopetegui se impuso con un 2-0 en un partido que el Barça no mereció perder por ese marcador, y ahora deberá salir con todo para la vuelta.

Con algo más de dificultad, LaLiga no puede darse por descartada. Sin embargo, el Atlético de Madrid se ha mostrado imparable en su camino hacia un nuevo título en el torneo de la regularidad. Solo una serie de resbalones de los rojiblancos les quitaría el título. Sin embargo, el Barça debe continuar sumando para mantener la presión.

El gran reto: continuar vivos en Champions

Las ausencias de Neymar y Di María a pocos días del partido clave en el Camp Nou dio alas a las esperanzas del barcelonismo. Además, los de Koeman venían despegando en los torneos locales y querían llevar ese ritmo al continente, frente a un equipo que había atacado psicológicamente al Barça.

Pese a que los primeros compases del encuentro lucían favorables para el FC Barcelona, los parisinos demostraron por qué eran los favoritos para obtener su primera victoria como visitantes en Barcelona. Un 1-4 ha dejado la llave muy difícil para los azulgranas que deberán plantear un partido perfecto en París.