Un momento tan inusual como histórico se vivió en el minuto 44 del partido que disputaron Benfica y Sporting Clube por los cuartos de final de la Taça de Portugal femenina. Las locales se disponían a lanzar un córner desde la izquierda cuando la jueza principal, Catarina Branco, detuvo el partido para mostrar una tarjeta blanca a dos asistentes médicos, uno de cada club. La razón: ambos atinaron en asistir a un fanático que se había desvanecido en la tribuna.

A diferencia de las dos tarjetas reglamentarias en el fútbol mundial, esta iniciativa busca reconocer el 'fair play' en los partidos por disposición de la Federación de Fútbol de Portugal (FPF) y la Junta de la Asociación Internacional de Fútbol. De momento, la FIFA y la UEFA no han avalado su uso, pero el sábado entró en vigencia en Portugal la tarjeta que busca "mejorar el valor ético en el deporte".

Finalmente, el Benfica aplastó al Sporting (5-0) en el Estadio Da Luz ante más de 15.000 fanáticos (asistencia récord) y avanzó a semis del torneo, donde enfrentará al FC Famalicão en una eliminatoria a ida y vuelta que se disputará entre el 15 de marzo y el 30 de abril. La otra llave la integran Braga y Racing Almada. Ambos ganadores se enfrentarán el 27 de mayo en la final del torneo que el Sporting Clube ganó el año pasado.

Platini ya había pedido una tarjeta blanca, pero con otro uso

Durante su gestión como presidente de la UEFA, Michel Platini había sugerido implementar una tarjeta blanca que permitiera sancionar a jugadores que protestaran decisiones arbitrales o tuviesen cruces con adversarios durante el partido. La amonestación dejaría al jugador 10 minutos fuera, pero Josep Blatter, entonces presidente de la FIFA, desestimó su uso y la iniciativa fue descartada a nivel internacional, sin siquiera llegar a implementarse en algún partido.

Desde 1970, las únicas tarjetas oficiales para su uso a nivel internacional son amarillas y rojas. En España, durante los primeros cinco años de implementación, las tarjetas amarillas eran de color blanco, hasta que la FIFA unificó el color a partir de 1975 para todas las competiciones profesionales y amateur. El sábado, el fútbol femenino luso comenzó a utilizar la tarjeta blanca, la cual podría extenderse a otros torneos en breve.