Tras ser casi siempre indispensable en el once titular del Paris Saint-Germain, Kylian Mbappé ahora está teniendo una participación más limitada, sobre todo en la Ligue 1. Esa situación volvió a quedar demostrada después de que el delantero fuera sustituido una vez más antes de concluir un partido, en este caso el del clásico francés ante el Marsella, el cual lo ganaban los parisinos a la hora de partido por 0-1, aunque con un jugador menos.

Como ya señalamos en FCBN este domingo, esta nueva salida del campo de Mbappé no ha hecho más que aumentar las tensiones y volverlas a colocar en el foco cuando las cámaras captaron un gesto de asombro y desacuerdo del futbolista. Luis Enrique decidió sustituir a Mbappé por Gonçalo Ramos. Tras el cambio, saludó a algunos miembros del staff técnico y a sus compañeros, evitando cualquier interacción directa con Luis Enrique. 

Luis Enrique tiene muy clara su gestión

Sobre todo esto, el técnico español fue consultado en rueda de prensa y su respuesta, como se esperaba, fue muy fiel a su estilo. “Es la misma música todas las semanas, es agotador. Soy entrenador, tomo decisiones todos los días. Seguiré haciéndolo hasta mi último día en París. Siempre trato de encontrar la mejor solución para el equipo. Si no entiendes mis decisiones, no me importa”, aseguró.

La tensión entre Mbappé y Luis Enrique refleja no solo un conflicto personal, sino también un punto de inflexión en la gestión del equipo. Mientras Mbappé se prepara para su salida, Luis Enrique se enfrenta al desafío de preparar al equipo para el futuro, sobre todo con la eliminatoria de Champions frente al FC Barcelona cada vez más cerca. Del lado del capitán de la selección francesa, se pudo ver una nueva foto en el Instagram del delantero, en esta oportunidad una un tanto enigmática, precisamente en el momento de su sustitución, un poco cabizbajo, a pesar del triunfo parisino (0-2).