Polémica en Inglaterra por las ayudas económicas a los 'grandes' de la Premier

El Banco de Inglaterra ha acudido al rescate de los clubes más ricos de la Premier League, debido a los estragos que está generando en las arcas de los equipos de toda Europa la emergencia sanitaria por la pandemia del COVID-19. Sin embargo, en una medida que a priori es positiva en medio de la tormenta, se convirtió en el centro de la polémica que mantiene enfrentados a los grandes conjuntos ingleses con los más chicos, los cuales alegan son discriminados en el difícil contexto actual que enfrenta la humanidad. 

Y es que, mientras el Arsenal y el Tottenham reciben más de 300 millones de euros en ayudas del programa oficial de financiación de empresas en dificultades, con intereses de un 0,5%, conjuntos como el Southampton, entre otros clubes menores, el Gobierno los ha remitido a otros programas que no ofrecen créditos a tan bajo interés como el citado. 

Por ejemplo, existe el caso del Southampton, que suscribió un crédito de 80 millones de libras, pero con 9,14% de interés. Una situación que contrasta con los 'gunners', quienes recibieron 135 millones con un interés del 0,5%, mismo caso de los dirigidos por el portugués José Mourinho, que fueron beneficiados con 197 millones por la misma cuota. 

De acuerdo a la información proporcionada por el periodista Diego Torres, la Asociación de Seguidores del Arsenal sostiene que el objetivo del crédito es asegurar el flujo de caja del club en caso de que el estadio de Emirates permanezca cerrado hasta el final de esta temporada, circunstancia que implicaría unas pérdidas de 178 millones de euros.

En teoría, esto último debería cumplirse; es decir, que el dinero sea utilizado para mantener la estabilidad mientras la tormenta del COVID-19 sigue sobre el mundo. “El propósito del The Covid Corporate Financing Facility (CCFF) es ayudar a las grandes empresas a mantener sus puestos de trabajo y sus proveedores. Esperamos que todos aquellos negocios que han recibido préstamos los utilicen de una forma coherente con ese objetivo”, reza parte del comunicado emitido por el Ministerio de Economía. 

Lo que genera suspicacia

Pero la falta de claridad en las disposiciones es lo que ha levantado ronchas en los clubes pequeños y ‘tirar sapos’. Se sabe que el Gobierno británico impuso a las compañías beneficiarias del crédito oficial unas restricciones en el gasto, especialmente rigurosas respecto al pago de primas a sus directivos, pero no existe un control específico sobre los fichajes. Es este último punto, el que hace brotar las suspicacias.