Las gestas de Ansu Fati sobre los terrenos de juego, con la camiseta del primer equipo azulgrana, le han valido no sólo para irrumpir con fuerza en 'Transfermarkt' y estar valorado cada vez en más millones de euros, sino también para acaparar cada vez más atención en las redes sociales. Apenas lleva un mes en la primera plantilla, y acumula nada menos que 1,6 millones de seguidores en Instagram.

Desde que debutase el pasado 25 de agosto frente al Real Betis, en el Camp Nou, su nombre se ha ido repitiendo cada vez con mayor fuerza en el entorno azulgrana. Se convirtió en el segundo jugador más joven en debutar con el Barça -el primero fue Vicenç Martínez en la temporada 1941-42, con 16 años y 280 días-, y en el décimo en hacerlo en la Champions League. Es también el goleador más joven en marcar con el Barça en Liga, con solo 16 años y 304 días, gracias a la diana que le anotó a Osasuna el pasado 31 de agosto.

Nada más debutar, Leo Messi le felicitó personalmente y publicó una imagen abrazándole en las redes sociales, algo que contribuyó todavía más a la ascensión del joven bissau-guineano con pasaporte español. Tan sólo ha realizado 83 publicaciones en Instagram, pero más de media plantilla del primer equipo le sigue, y no solo canteranos como Aleñá o Sergi Roberto, sino futbolistas del peso mediático de Piqué, Busquets o Ter Stegen, además de otros compañeros como Frenkie de Jong, Arthur o Nélson Semedo.

Otra muestra más del espectacular impacto que está teniendo en Internet son los más de 22 millones de resultados -22.200.000 exactamente- que ha generado ya en los buscadores de Google, un claro síntoma de que los aficionados cada vez están más interesados en la actualidad sobre su persona. Ansu Fati se ha transformado ya en un fenómeno viral imparable, y recuerda mucho a lo que sucedió hace dos años con Kylian Mbappé.

Ansu Fati, con los pies en el suelo

El jugador del FC Barcelona ha empezado a trascender a nivel mediático a una edad más temprana, incluso, que la que tenía el francés cuando explotó con el Monaco en la Ligue 1 y la Champions League. De ahí que en el club se busque desinflar el globo para no distraer al adolescente de su principal cometido, que debe ser el fútbol y la continua evolución.

Por ahora, en cualquier caso, Ansu Fati está mostrando una madurez impropia para alguien de su edad, y combate el foco de las cámaras con humildad. Sabe que, aunque tiene asombrada a la hinchada barcelonista y a gran parte del fútbol internacional, todavía no ha hecho nada. Y, por suerte para el club azulgrana, sus ambiciones con la camiseta del FC Barcelona son muy grandes.