Arthur es el pasador más efectivo del FC Barcelona... Pero también mucho más

Cuando el FC Barcelona contrató a Arthur, ya sabía cuál era su principal virtud: El de Goiania lee el juego como nadie, y su dominio en el pase ya le ha valido comparaciones con el mismísimo Xavi Hernández. En su presentación, sin embargo, el brasileño advirtió que quiere acercarse todo lo posible a las cualidades y éxitos del egarense, pero que tratará de escribir su propia historia en el Camp Nou. De momento ya lo está haciendo, y además, a lo grande.

Evidentemente, lo que más llama la atención del ex del Gremio de Porto Alegre es su seguridad, ya que es tan difícil verle perder un balón como fallar un envío. Sus porcentajes de acierto en el pase superan habitualmente el 90% e incluso rondan el 95%, pero este aspecto está impidiendo en ocasiones que se le valore en su justa medida.

El centrocampista se ha hecho un sitio como imprescindible en la medular, pero no sólo por su precisión, sino por su esfuerzo defensivo y riqueza táctica. Sergio Busquets e Ivan Rakitic respiran más tranquilos si tienen al joven al lado, y no se cansan de repetir que su presencia les hace mejores y facilita el trabajo a todo el equipo. Y no es para menos.

Arthur guarda la posición como nadie y se está convirtiendo en un maestro en las coberturas, lo que ha dado equilibrio a un equipo muy ofensivo que sigue ajustándose en su retorno al 4-3-3. El brasileño, el catalán y el croata son tres pilares en la sala de máquinas, tan aptos para ayudar en la construcción como sacrificados para participar en la destrucción.

Ya no es extraño ver que es el primero en realizar la presión ofensiva, o verle robar muchos balones en área propia. Es por eso que Ernesto Valverde debe dosificarle al máximo, porque con una entrega tan destacada, el físico no le está dando para aguantar más de 60 o 70 minutos. El tiempo y los entrenamientos acabarán mejorando su resistencia.

Arthur es responsable, pero también empieza a arriesgar

Más allá de una eficacia impagable para el Barça, otro aspecto a tener en cuenta es que está ganando en atrevimiento, lo que le convertirá también en un arma para el ataque. Arthur está venciendo la timidez y ya se atreve a jugarse algún pase en zona de tres cuartos, algo que, por características, podría dotarle también de una interesante capacidad asistente. El ex del Gremio hace tiempo que enamoró a los culés, y lo mejor de todo es que todavía tiene un amplio margen de mejora.