Pese a que el protagonismo de esta temporada se lo están llevando jóvenes como Ansu Fati o Carles Pérez, Riqui Puig es una de las grandes joyas de la Masia y se espera mucho de él en un futuro. A sus 20 años, es uno de los referentes del FC Barcelona B y se espera que, en un futuro no muy lejano, se convierta en un futbolista importante en el primer equipo.

Durante los meses de verano, se especuló con la posibilidad de que el centrocampista catalán se marchase cedido a otro equipo de Primera División con la intención de tomar rodaje en equipos de primer nivel. No obstante, en el club prefirieron mantener al de Matadepera en el segundo equipo para seguir formándose y para que Ernesto Valverde pueda tirar de él si es necesario en el primer equipo.

Pero, por el momento, las circunstancias son evidentes: el 'ovebooking' de centrocampistas en la primera plantilla hace que sea muy complicado que el catalán tenga opciones de jugar. Por ello, desde algunos sectores se llegó a tantear, de nuevo, la opción de una posible cesión, aunque parece también una opción poco factible.

Según las informaciones publicadas por el Mundo Deportivo, los responsables del fútbol formativo del FC Barcelona creen que la mejor forma de hacer progresar a Riqui Puig es mantenerle en el filial para que llegue hasta los 50 partidos, algo que chocaría frontalmente con una posible marcha en invierno.

De este modo, el catalán seguirá los pasos de otros grandes futbolistas que tampoco se marcharon prematuramente y que siguieron su formación en las categorías inferiores. Otros grandes centrocampistas como Xavi Hernández, Andrés Iniesta o Thiago llegaron a formar parte del primer equipo sin necesidad de pasos intermedios para curtirse en equipos de nivel.

Riqui Puig, ¿un socio perfecto para Arthur y De Jong?

El FC Barcelona se ha ido reforzando en las últimas temporadas en su centro del campo con 'peloteros' como Arthur Melo o Frenkie de Jong, de gran talento pese a su juventud. Con el tiempo, se espera que Riqui Puig se una a ellos para formar una medular de ensueño, que haga recuperar ese fútbol tan atractivo y efectivo de la época en la que Pep Guardiola era el entrenador y tenía a sus órdenes a Xavi o Iniesta.