Ernesto Valverde se ha visto obligado a abandonar el FC Barcelona por la puerta de atrás, tras una serie de malos resultados que han colmado un vaso ya lleno desde el naufragio de la temporada pasada en Anfield. La afición había perdido la paciencia, y la junta directiva también lo hizo después de la eliminación en la semifinal de la Supercopa de España contra el Atlético de Madrid (2-3).

El 'Txingurri', en cualquier caso, no lo tuvo fácil para gestionar la situación de algunos de sus jugadores. Si bien es cierto que la mayoría de la plantilla se comportó de forma profesional durante toda su trayectoria como técnico del primer equipo, hubo algunos que no dieron la talla en este aspecto. Todas las miradas se han dirigido a Ousmane Dembélé en más de una ocasión, tanto por sus retrasos en entrenos puntuales como, sobre todo, por sus continuas lesiones.

Hay que decir que el joven atacante francés ha mejorado y ya hace meses que se dedica única y exclusivamente a su carrera deportiva. Se cuida más tanto en la alimentación como en lo que respecta a las horas de descanso. Trabaja a destajo con los fisioterapeutas para intentar recuperarse de la lesión que sufre actualmente y, a partir de ahí, tiene el objetivo de fortalecer su musculatura para prevenir futuros problemas físicos.

La actitud de 'Dembouz' ha mejorado, y podría decirse que el joven futbolista galo no ha sido el 'enfant terrible' de Valverde en estos últimos meses. El relevo lo ha tomado Arthur Melo. Desde el diario 'AS' aseguran que el centrocampista brasileño recibió varios avisos y alguna bronca de Ernesto Valverde, tanto en la pasada campaña como en el curso actual.

Todo empezó con su escapada a París en febrero de 2019 para acudir a la fiesta de Neymar, algo que no debió hacer teniendo en cuenta que dos días después el Barcelona jugaba la ida de semifinales de Copa del Rey contra el Real Madrid. En las redes sociales se filtraron fotografías suyas en la fiesta, muy criticadas por una buena parte del barcelonismo.

Ahí fue cuando Valverde le abroncó, instándole a aparecer en una de las ruedas de prensa posteriores para disculparse ante los seguidores culés. Así lo hizo Arthur, aunque eso no significó que cesaran sus actos de indisciplina. Y es que, esta misma temporada, el brasileño habría protagonizado una escapada a Andorra para practicar snowboard, una actividad de alto riesgo totalmente prohibida para un futbolista profesional, y que además realizó estando convaleciente de una pubalgia. Eso agravó más si cabe el problema, y desde principios de diciembre está de baja.

El citado rotativo asegura además que el centrocampista se comprometió a ponerse a tope durante las fiestas de Navidad para superar su pubalgia, aprovechando el parón por vacaciones. Hasta se dijo que se llevaría a Brasil a dos fisioterapeutas para no bajar la guardia. El caso es que, cuando llegó el 29 de diciembre, a Valverde le habrían informado de que el jugador regresó con sobrepeso, y que los problemas de pubalgia se habían incrementado.

Arthur ya se entrena con sus compañeros

El club emitió entonces un comunicando posponiendo el regreso de Arthur tres semanas más. El centrocampista brasileño no ha reaparecido aún, aunque ya se entrena junto al resto de sus compañeros desde hace unos días y, bajo el mando de Quique Setién, podría jugar sus primeros minutos de 2020 ante el Granada. De lo contrario, se le espera para el duelo copero ante el Ibiza o bien para la siguiente jornada de LaLiga Santander. Si Arthur quiere triunfar en el FC Barcelona y hacerse importante en los esquemas de Setién, deberá ponerse las pilas de cara a lo que resta de curso.