Si bien es cierto que el FC Barcelona había mostrado un gran nivel de juego durante todo el partido ante el Athletic, no fue hasta el minuto 62, a falta de media hora para el final, cuando sentenció el compromiso con el 1-3No podía ser otro que Leo Messi el encargado de poner punto y final a la lucha por los puntos, merced a una jugada que inició él mismo y que acabó con un gran pase de Griezmann de vuelta al argentino.

Disparo fuerte y alto, de primeras, y ayuda del travesaño para que el balón se metiera dentro de la portería. Era el gol que confirmaba definitivamente los tres puntos para el FC Barcelona, más allá de que los vascos consiguieran reducir distancias tras un error del propio Messi en el minuto 90. Una nimiedad sin importancia, porque la cita hacía tiempo que estaba resuelta.

El caso es que la asistencia de 'Grizi' a Leo significó el primer doblete de jugada de Messi esta temporada 2020-21, y el noveno tanto que anota en LaLiga Santander este curso. Nueve goles con los que iguala a sus principales rivales en la lucha por el Pichichi, Luis Suárez, Gerard Moreno y Iago Aspas. Dos goles con los que, además, el '10' vuelve a posicionarse como el gran favorito para llevarse el galardón individual.

En la jugada de su segundo gol en San Mamés, no sólo fue meritorio el pase final de Griezmann sino el hecho de que participaran en la jugada todos los jugadores de campo menos Araujo, algo que ya dice mucho de la mejoría en el juego de los de Koeman. El técnico holandés está empezando a dar con la tecla, justo cuando Messi empieza a relucir su mejor nivel.

Messi pudo irse de Bilbao con un póquer

Y es que fueron dos, pero bien podrían haber sido cuatro los goles de Leo Messi en La Catedral este miércoles. Porque, además de sus dianas, Messi acarició el 'póquer' al protagonizar dos disparos de bella factura que fueron repelidos por la madera: uno de ellos se marchó a la cruceta, mientras que otro se estampó en el flanco derecho de la portería de Unai Simón, sin que el guardameta rojiblanco pudiera hacer nada.

Messi, en definitiva, parece haber empezado el año 2021 más enchufado que nunca, tanto él como Pedri y la gran mayoría de sus compañeros. El Barcelona consiguió una victoria de méritos en el Día de Reyes, que le permite colocarse ya a cinco puntos del Madrid y a siete del Atlético, si bien es cierto que los 'colchoneros' tienen dos partidos extra por disputar. Que no cunda el pánico. Queda mucha Liga, y en el fútbol todo puede cambiar en un abrir y cerrar de ojos.