Desde que llegó al FC Barcelona, Luis Enrique supo que una de las principales causas para que surgiese efecto su método pasaba por recuperar a Sergio Busquets. Y el de Badía aceptó un reto que le ha llevado a recuperar su mejor nivel para liderar el centro del campo azulgrana. Sin embargo, varios bajones físicos la pasada campaña y en el inicio de ésta le han llevado a no encontrarse cómodo en algún partido.

Varios medios criticaron alguno de sus partidos sin pararse a pensar todo lo que le da al equipo, esté acertado los 90 minutos de juego o tenga alguna que otra laguna. Son muchos los tangibles que demuestra "Busi" pero también están los intangibles, difíciles de controlar por muchos pero que a su entrenador no se le escapan.

"Elogio públicamente la actitud de Busi. Yo lo veo bien , aporta muchas cosas, liderazgo dentro del equipo. Los jugadores no son máquinas. Cuando uno comete un error no conviene hacer una autocrítica muy exagerada", dijo Luis Enrique en la rueda de prensa previa al choque ante el Sevilla. 

Todos en el seno del equipo azulgrana saben que muchas de sus posibilidades pasan porque Sergio recupere confianza y su nivel vuelva a ser el sobresaliente con el que siempre ha enamorado a la afición. Mientras tanto toca confiar en el canterano pues a Busquets no se le discute, a Busquets se le blinda.