Enmedio de las dudas sobre su futuro, Dani Alves ha vuelto a sorprender a todos, aunque en esta ocasión por un hecho agradable. El brasileño ha aprovechado las vacaciones veraniegas para casarse con su novia, Joana Sanz, en Formentera.

Algunos días después de asistir al enlace de uno de sus ex compañeros y también amigo personal, Leo Messi, el lateral también organizó el suyo el pasado viernes, en un lugar íntimo de las Islas Baleares y junto a sus allegados.

Es la segunda vez que el ex jugador del FC Barcelona pasa por el altar, puesto que en 2011 ya se casó con la que fue su exposa y todavía sigue siendo su representante, la también brasileña Dinorah Santana.

Futuro incierto

Es la segunda vez en una semana que Dani Alves se convierte en protagonista de las portadas. Tras desvincularse de la Juventus el brasileño ya fue noticia hace unos días por un tema relacionado con el mercado de fichajes, y es que aunque parecía que su destino sería el Manchester City, ahora se afirma que elegirá el Paris Saint Germain.