Moussa Wagué llegó al FC Barcelona hace dos veranos procedente de la liga belga, después de haber hecho un gran Mundial en Rusia con su selección, la de Senegal. Tras una primera temporada en el filial azulgrana en la que dejó muy buen sabor de boca, recibió ficha del primer equipo para formar parte de la plantilla de Ernesto Valverde.

El plan inicial era que Wagué fuese el suplente de Nélson Semedo en la demarcación del lateral derecho para que así Sergi Roberto pudiese adelantar su posición al centro del campo. Sin embargo, el africano no ha tenido ni un solo minuto en lo que va de campaña, ni siquiera ante la plaga de lesiones en la defensa. 

Sin ir más lejos, en los partidos contra el Inter de Milán en Champions League y contra el Sevilla en LaLiga Santander, Ernesto Valverde tenía las bajas de Jordi Alba y Junior Firpo en la izquierda, por lo que apostó por recolocar a Semedo al carril zurdo. Ahí se abría una puerta para Wagué, pero el técnico extremeño prefirió retrasar la posición de Sergi Roberto, olvidándose del joven senegalés.

Hasta el momento, el africano solamente ha sido convocado tres veces (naturalmente, en ninguna de ellas ha jugado) pero se ha quedado fuera de la lista en las otras siete. Algo que no deja de llamar la atención, especialmente porque Valverde fue el primero en darle oportunidades en el tramo final de la pasada campaña, cuando era jugador del filial pero acabó siendo titular en algunos partidos de Liga dejando buenas sensaciones.

Algo extraño parece estar sucediendo con Wagué y no solamente en el Barça, sino también en la selección senegalesa. En la Copa de África de este pasado verano, jugó los dos primeros partidos de titular, pero acabó perdiendo el puesto y no volvió a ser titular en ninguna otra ocasión. Un caso francamente raro, especialmente por las buenas sensaciones que daba este futbolista cuando tenía oportunidades.

Wagué, velocidad y potencia

Futbolísticamente, Wagué destaca por ser un lateral derecho con mucha proyección ofensiva. Es un portento físico, rápido y con capacidad para convertirse siempre en una opción de pase para sus compañeros en la banda. Lo demostró en la selección senegalesa, en el filial e incluso con el primer equipo en el tramo final de la pasada campaña. No obstante, algo debe ver Valverde en los entrenamientos que no le acaba de convencer.