Con la victoria en el Ramón Sánchez-Pizjuán, el FC Barcelona de Luis Enrique mató dos pájaros de un tiro. Por un lado, aprovechó el traspiés del Atlético de Madrid ante la Real Sociedad (2-0) para aumentar a cuatro la diferencia con estos. Por otro, fue con el Sevilla, equipo al que doblegó, con el que también vio incrementarse la diferencia de puntos justo antes de irse al parón por selecciones.

El Real Madrid había vencido en el Bernabéu tras un partido muy gris donde tuvo que aparecer Gareth Bale para doblegar al CD Leganés (3-0). Eso hacía que no se pudiera fallar y no se falló. La diferencia ahora con los blancos sigue siendo de dos puntos pero a estos les queda partidos y visitas bastante complicados.

A dos encuentro del Clásico, los merengues deberán visitar al Atlético de Madrid en el Vicente Calderón para disputar el derbi madrileño. Sin Pepe ni Sergio Ramos, el conjunto blanco deberá mejorar mucho su juego para poder vencer a los del "Cholo" Simeone. Esa misma jornada el Barça recibe al Málaga en el Camp Nou.

El siguiente partido de Liga, justo antes del choque del tres de diciembre, habrá sos partidos diametralmente distintos. Mientras el Madrid recibe a un ode los últimos de la clasificación, el Sporting de Gjón, los blaugranas viajarán a su campo maldito Anoeta para enfrentar a la Real Sociedad. Es clave, por lo menos, mantener la diferencia de dos puntos con los madrileños hasta el partido del Camp Nou, pues una victoria ayudaría a superarlos en la clasificación.